Cultura

Descubren en un cortijo de Antequera la mezquita rural más grande de Al-Andalus

La construcción, de 840 metros cuadrados y con capacidad para 700 personas, fue edificada entre los siglos X y XI para desarrollar una ciudad

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Cuando en 1982 Carlos Gozalbes Cravioto buscaba un yacimiento romano en Antequera para la publicación de un libro no imaginaba que tenía ante sí «el descubrimiento más importante de la arqueología medieval en los últimos 50 años». En plena Vega de Antequera, había un antiguo cortijo deshabitado que llamó su atención: «Vi un edificio que me pareció raro porque estaba hecho de sillares y por su altura». Tan extraño era, que finalmente ha resultado ser la mezquita rural más importante y grande de España.

Con 840 metros cuadrados, la mezquita, que se pudo construir en el siglo X o XI y posteriormente fue transformada en vivienda de uso agrario, mantiene en un alto estado de conservación muros de sillares de piedra de más de cuatro metros de altura y varios arcos de herradura totalmente íntegros.

Es casi un milagro

Según explica el propio descubridor, la mezquita mide en su conjunto 29 por 29 metros y está formada por una sala de oración de 29 por 16 metros y de un patio de 29 por 13 metros; además, lo más sorprendente y «casi un milagro» es que haya pasado desapercibida durante siglos para los investigadores. De hecho, ni siquiera nadie reparó en que el inmueble se llama Cortijo de las mezquitas.

Fue en 2002 cuando Gozalbes, miembro del Instituto de Estudios Ceutí y profesor de Historia en el IES Ciudad de Melilla, consiguió adentrarse en el inmueble y, con permiso del propietario, inició unos estudios que han desembocado en el libro El cortijo la mezquita. Una mezquita medieval de La Vega de Antequera, que financiado por la Consejería de Cultura y el Ayuntamiento de Antequera será presentado en unas semanas. En él el historiador describe una mezquita con capacidad para unas 700 personas que fue construida posiblemente con la idea de hacer a su alrededor una ciudad que nunca llegó a desarrollarse; de ahí, que el yacimiento se encuentre en una zona rural y despoblada. Gozalbes apunta que hacia el siglo XIII, con la conquista de Estepa, la mezquita debió de dejar de tener un uso sagrado. Además, parte de ella fue destruida, conservándose hoy íntegramente el muro del fondo de la sala de oración y trozos de los muros laterales.

Junto a ello, la mezquita conserva varios arcos de herradura y otros que han sido tapiados o convertidos en puertas que dan a otras dependencias del cortijo.

Según el profesor de Arqueología Medieval de la Universidad de Málaga, Manuel Acién, se trata de un edificio singular e inesperado con algunas contradicciones en sus elementos de construcción, por lo que habría que estudiarlo detalladamente para datarlo con exactitud. Pese a ello, considera también que se trata de la mezquita rural más importante de España.