Primavera en Navantia

Los nuevos diques del viejo astillero de Cádiz ya esperan faena y en casi todos los aspectos, los seres humanos disfrutan o sufren lo que esperan. La semana que viene estará en sus instalaciones el crucero ‘Mariner of the Seas’, de la compañía Royal Caribbean, para someterse a una completa y ambiciosa transformación. Serán casi cinco semanas de trabajo intensivo para 2.000 personas que reformarán el crucero hasta el punto de dotarlo con nuevos camarotes. Este encargo podría considerarse como uno más pero, afortunadamente, es otro más.

El astillero de Cádiz se ha convertido en un referente internacional en el mercado de la reparación de cruceros y no ha sido fácil llegar hasta aquí. Navantia inició de manera muy tímida hace ya casi diez años, en septiembre de 2009, este camino y en una década, a base de buen trabajo, de cumplir con las expectativas de los contratantes, se ha colocado entre los primeros, compitiendo con duros rivales: Italia, Francia y los países nórdicos. Los astilleros gaditanos se embarcaron en esta tarea por obligación y necesidad. No quedaba otro camino. Los recortes presupuestarios y los ajustes se llevaron a muchos clientes, como la Armada Española, de los diques de reparación, transformación y mantenimiento. Navantia fue la principal afectada por esta recesión, perdía a sus principales demandantes.

Ante esta situación, los astilleros públicos tuvieron que reinventarse y explorar nuevos mercados . De esta forma, surgió la necesidad de abarcar la reparación de cruceros como un objetivo prioritario. La compañía Iberocruceros fue la primera, en la década anterior aún, que tendió la mano y confió en Navantia para reformar uno de sus barcos. El primer trabajo que se realizó en el astillero gaditano fue la reparación del ‘Grand Voyager’. Esa firma, y otras, cada vez más, apostaban por la empresa naval española. Llegaron las grandes transformaciones y hace ya ocho años, la primera gran recompensa cuando también Royal Caribbean decidió confiar la reparación del ‘Splendeur of the Seas’. Desde entonces Navantia ha ido sembrando éxitos hasta recoger ahora una importante cosecha de oportunidades. El astillero de Cádiz batió en 2016 y 2017 su récord en materia de reparaciones de cruceros. Grupos enteros tienen atados con Navantia acuerdos para todas las reformas. La planta vuelve a tener trabajo en primavera, como todas las últimas. El crudo invierno terminó.