Exigen mejoras para los policías de Vigo que intervinieron 60 toneladas de droga

El pequeño grupo de policías que compone la Udyco de Vigo, una unidad «puntera a nivel español» según reconocen los propios sindicatos, denuncian la carencia de medios con la que trabajan y la falta de catalogación de sus puestos en relación con las funciones que desarrollan a pie de calle. Con más de 60 toneladas de droga decomisadas en sólo dos años y una docena de operaciones contra el narcotráfico en Galicia, los agentes exigen que la comisaría de Vigo cuente con una unidad canina —sin tener que depender de la de la Jefatura de La Coruña—. También reclaman un reconocimiento que otras unidades sí tienen, y apuntan a las particularidades de su trabajo y a los resultados de los dos últimos años.

«Este grupo sabe a qué hora entra a trabajar, pero nunca saben a qué hora volverán a casa o si regresarán ese día. Además, las investigaciones son cada vez más complicadas porque los delincuentes, con cada detención, van aprendiendo y cometiendo menos errores. Muchas veces, una investigación empieza en Vigo y puede llevar a un policía a recorrer media España atando cabos. Es un trabajo muy laborioso que sufren las familias y que tiene un reconocimiento profesional muy escaso, pese a los excelente resultados». Así relatan quienes conocen de cerca la realidad de los miembros de la Udyo su día a día, entre ellos, representantes de la Unión Federal de Policía que exige medidas inmediatas en su situación a los altos mandos.

Doce operaciones en 2 años

Como argumento tienen la nómina de operaciones realizadas por este grupo en los últimos dos años. Entre las más mediáticas esta la «Operación Albatros» que se remonta a junio de 2013 y en la que los efectivos policiales se incautaron de 3.400 kilos de cocaína, un pesquero, un velero, nueve coches, una moto, numerosos equipos informáticos y teléfonos y 60.500 dólares. Hubo 25 detenidos. A este caso se suman otros resueltos desde Vigo como la «Operación Chupitazo» que data de noviembre de 2014 y en la que se intervinieron 45.000 litros de alcohol ilegal, 22 armas de fuego (entre ellas varias armas largas de guerra) y una gran suma de dinero. Una de las últimas operaciones que corrió a cargo de esta unidad, desarrollada entre mayo y agosto de 2015, sumó 21 detenciones en cuatro provincias, tres lanchas decomisadas con 6 toneladas de hachís y un velero con 600 kilos de cocaína.