Besteiro fía su futuro a que De Lara lo desimpute tras prestar declaración

José Ramón Gómez Besteiro regula con cuentagotas sus apariciones públicas tras recibir el mazazo de su imputación por la juez Pilar de Lara, que le atribuye cuatro presuntos delitos de prevaricación, cohecho, tráfico de influencias y contra el territorio. Ayer entendió oportuno tomar la palabra después de que Ferraz desvelara que no sería senador por designación autonómica y su número dos, Pilar Cancela, insinuara el miércoles que podría dimitir de su cargo de mantenerse su actual situación procesal. Y lo hizo para fiar su futuro al día 31, cuando tendrá que comparecer ante la juez, un encuentro tras el que confía en que se levante su imputación.

«Confío plenamente en mi inocencia y en que se ponga fin pronto a mi situación», declaró a los periodistas en un encuentro en el Parlamento previsto inicialmente para hablar de la situación de la CRTVG: «Espero que la imputación se levante cuanto antes, por sentimiento y por razón».

En varias ocasiones esgrimió la «confianza» en que sea desimputado, a pesar de que De Lara no ha actuado con esa celeridad en casos anteriores.

Esta es una posición que Besteiro sostiene en público y en privado: la convicción absoluta en que saldrá desimputado tras verse con De Lara porque algunas de las acusaciones del auto judicial no se sostienen. Prefiere no especular con qué podría pasar si no se produce esa circunstancia porque «no puedo hacer predicciones de futuro», reconoció este jueves a los medios, aunque admitió ser «una persona extraordinariamente responsable», afirmación que, leída entre líneas, podría entenderse como dejar una puerta abierta a adoptar decisiones «para no dañar al partido».

Dentro de ese ámbito enmarca su entorno el hecho de renunciar a la Cámara Alta, un movimiento que siguen atribuyendo a una elección personal del propio Besteiro, aunque quien lo verbalizara fuera el portavoz socialista en el Congreso, Antonio Hernando. Éste precipitó con sus declaraciones del martes el plan inicial del barón gallego, que consistía en informar primero al Comité Nacional Galego (CNG) y, posteriormente, trasladarlo a la opinión pública de la Comunidad.

Dimisión no contemplada

Sobre su continuidad en el cargo, Gómez Besteiro afirmó que «no se me pasó por la cabeza dimitir», si bien el pasado sábado, tras conocerse su imputación, avanzó a los integrantes de su Ejecutiva que el relevo en la Secretaría General podría producirse, conminándoles a estar preparados para ello. «Soy el secretario general y actúo como tal —zanjó ayer—. Me siento respaldado personalmente por el partido», tanto en Madrid como en Galicia: «Actúo con normalidad orgánica».

Besteiro tampoco dijo sentirse identificado en las manifestaciones de Susana Díaz, quien el día anterior había pedido que en su caso se aplicara «el mismo criterio que con Chaves y Griñán», diputado y senador que dimitieron de sus escaños tras ser imputados por el Supremo en el caso de los ERE: «No me siento aludido porque no ostento ningún cargo público».

Cita el sábado 18

Será entonces cuando reúna al órgano directivo del PSdeG más importante entre congresos, el CNG, donde algunas voces habían especulado con que aparecieran críticas no solo por su situación, sino también por la debacle urbana en la provincia de La Coruña o el sainete de la Diputación de Lugo. Besteiro restó importancia al cónclave, donde volverá a entonar el análisis ya conocido del resultado de las municipales: retrocede el PP, el PSOE sube allí donde gobierna —verdad a medias porque ahí están los casos de Lugo y Orense—, etc.

«Mucha gente me ha trasladado su apoyo», confesó, aunque no especificó nombres. Hasta el momento, los más explícitos han sido algunos dirigentes de Lugo, su provincia. Además, aseguró que por el momento no ha recibido «ningún reproche» a la gestión de la crisis de Lugo, si bien acepta «todas las opiniones», incluso las críticas.