Imagen de archivo del embalse de la Pedrera, en Orihuela
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guerra del agua

La Universidad de Castilla-La Mancha casi triplica la capacidad del trasvase

Un curso revela que el agua del Tajo se usa más para la población del «eje Madrid-Lisboa»

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Los expertos de la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM) divulgan esta semana las características del trasvase del Tajo al Segura, al que describen con una capacidad de «hasta 600 hectómetros cúbicos» anuales, casi el triple de lo que se ha transferido en los últimos años y una cantidad que nada tiene que ver con las tesis de sus dirigentes políticos en el gobierno, quienes mantienen su cruzada para eliminarlo definitivamente con un recurso inminente en la Audiencia Nacional.

Por segundo año consecutivo, en este campus se imparte el curso propio «Gestión y planificación del agua en la cuenca del Tajo», dirigido a estudiantes, egresados y cualquier interesado. La directora, Beatriz Larraz, destaca en la presentación de este ciclo que en esta demarcación hidrográfica del Tajo se da «el mayor trasvase inter-cuencas operativasen la Península Ibérica: el acueducto Tajo-Segura, que puede llegar a trasvasar hasta 600 hectómetros cúbicos desde la cabecera», si bien sitúa en contexto el uso del agua de este río, puesto que fundamentalmente se destina a consumo humano y no para el campo.

Así, mientras que el 30% de los caudales de esta cuenca tienen como fin los hogares, la media en España se queda en el 12%. En cambio, para regadío se aprovecha el 60% en el ámbito de la Confederación Hidrográfica del Tajo (CHT) frente al 82%, de media, en el conjunto del país. Y aporta Larraz un elemento del que poco se habla en Castilla-La Mancha, sobre todo su presidente autonómico, Emiliano García-Page: que esa «menor importancia del regadío» se debe a «la presencia de la concentración poblacional del eje Madrid-Lisboa».

No es lo más importante

De hecho, dentro de las consideradas cinco cuestiones que más afectan a la gestión de recursos hídricos del Tajo, en este curso se aborda primero ese consumo humano, por delante de la «disminución de las aportaciones naturales en cabecera» en los últimos 30 años, otro factor negativo, y también del peso del trasvase.

Los conocimientos aportados desde la Facultad de Ciencias Ambientales y Bioquímica también aluden a otros factores que influyen en el aprovechamiento de sus recursos hídricos, como «la importancia de los usos hidroeléctricos en el tramo medio y bajo del río (Extremadura fundamentalmente), así como el carácter internacional de la cuenca y, por lo tanto, la obligación de cumplimiento de las obligaciones del Convenio de Albufeira», en Portugal.

Contacto con Rajoy

Mientras, el Gobierno de Castilla-La Mancha se congratula de que el presidente de Murcia, Pedro Antonio Sánchez, «empiece a considerar el agua desalada» ya que mañana planteará al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, bajar el precio de este recurso para los regantes.

En un comunicado, el Ejecutivo castellanomanchego valoró las manifestaciones que había realizado horas antes el presidente murciano, quien avanzó que pedirá a Rajoy «establecer provisionalmente un precio del agua desalada, que sea asequible, razonable y rentable para el campo murciano» teniendo en cuenta el déficit «clarísimo» de recursos hídricos y que «en el Tajo hay el agua que hay». Nuevamente, desde el gabinete del socialista Emiliano García-Page se sostuvo que «la situación del Tajo actualmente es insostenible para todos».

Y otros que tampoco atienden a los datos expuestos por la Universidad de Castilla-La Mancha en el citado curso son los miembros de la Plataforma de Toledo en defensa del río Tajo, que ha convocado actos de protesta el próximo 26 de septiembre, en la capital toledana, contra las medidas que consideran están causando el «expolio» del río. Es más, su rechazo se extiende a las nuevas medidas de gestión puestas en marcha en el plan de cuenca aprobado en 2014 y el memorándum Tajo-Segura incorporado a la Ley de Evaluación Ambiental, que se acordó por consenso entre cinco autonomías y el Gobierno central.

«La tozuda realidad está poniendo de manifiesto que la nueva legislación no solo no resuelve los problemas sino que los agudiza», criticaron desde esta plataforma.

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