Los socialdemócratas nórdicos se entregan a los brazos de la OTAN

La invasión rusa de Ucrania ha hecho que esos partidos de Finlandia y Suecia abandonen su rechazo histórico a la Alianza

Un grupo de personas protesta contra la OTAN en Estocolmo EFE

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La invasión de Ucrania ha llevado a los socialdemócratas nórdicos a renegar de su rechazo histórico a la OTAN. El Partido Socialdemócrata de Finlandia se sumó ayer al apoyo ya unánime entre las fuerzas políticas del país a la entrada en la Alianza y la moción fue defendida por su presidenta y primera ministra, Sanna Marin, que describió la decisión como «la mejor opción para mantener la seguridad de Finlandia». «No queríamos cambiar los cimientos de nuestro orden de seguridad. No queríamos una guerra en Europa. Estamos a favor de la paz, de los acuerdos y la cooperación. Pero nos preocupamos por la seguridad de Finlandia y de quienes viven aquí . Con nuestra decisión la aseguramos ahora y en el futuro», justificó.

Tanto el SDP como la Alianza de Izquierdas han sido tradicionalmente contrarios a la OTAN y eran hasta ahora las dos únicas fuerzas políticas sin manifestar oficialmente su apoyo a la adhesión . La Alianza de Izquierdas, uno de los cinco socios de la coalición gubernamental, no formalizará su posición hasta el mes de junio. Su líder, la ministra de Educación, Li Andersson, ha dejado libertad a sus diputados en la votación parlamentaria y ha garantizado que todos sus ministros votarán a favor. Los cinco partidos de centro-izquierda que forman el Gobierno acordaron en el pacto de coalición, hace tres años, mantener la política de no alineamiento. En el documento del pacto quedó especificado que Finlandia no pediría su ingreso en la OTAN durante la presente legislatura. Sin embargo, el presidente finlandés informó ayer a Vladimír Putin de la inminente candidatura de su país en una conversación telefónica «directa y sin rodeos» en la que «evitar tensiones fue considerado algo importante». El Kremlin emitió después un comunicado en el que calificó la decisión de Helsinky como un «error».

Los socialdemócratas suecos están también rectificando en su generacional rechazo a la OTAN, en una reunión extraordinaria que dio inicio ayer y que terminará hoy con una declaración oficial. Su secretario general, Tobias Baudin, adelantó ayer que «tomamos esta decisión con independencia y según lo que consideramos en este momento mejor para nuestro país». Baudin confirmó que durante todo el proceso han tenido un estrecho contacto con el partido hermano finlandés. «Ha habido una discusión en profundidad, hemos hablado mucho hasta sentir que estamos listos para dar el paso », explicó. La ministra de Exteriores sueca, Ann Linde, reconoció ayer ante sus compañeros de partido que en las reuniones mantenidas con su homólogo estadounidense, Antony Blinken, Washington ha expresado abiertamente su interés de que Finlandia y Suecia entren en la OTAN y que se ha mostrado dispuesto a «dar distintos tipos de garantías de seguridad hasta que se haga efectiva la entrada en la Alianza».

Tanto el SDP como la Alianza de Izquierdas de Finlandia han sido tradicionalmente contrarios a la OTAN y eran hasta ahora las dos únicas fuerzas políticas sin manifestar oficialmente su apoyo a la adhesión

Condiciones turcas

En ambas reuniones socialdemócratas se siguió ayer en tiempo real el pulso de la respuesta turca a la doble solicitud de entrada en la OTAN. Después de que el Gobierno turco hubiese mostrado reticencias que podrían entorpecer o al menos retrasar el proceso de adhesión , el portavoz del presidente Recep Erodogan, Ibrahim Kalin, declaró que Turquía está «abierta» a la membresía de Suecia y Finlandia en la OTAN, aunque, añadió, que «en tales casos se requieren negociaciones con los países» y tomar medidas sobre las «actividades terroristas en Estocolmo». Se refería a la prohibición de asociaciones, organizaciones o actividades de individuos relacionados con el PKK . Erdogan ha reprochado a estos dos países que sean un «refugio de terroristas del PKK».

Turquía podría bloquear la adhesión porque para recibir nuevos miembros la OTAN requiere unanimidad de los existentes. «No cerramos la puerta, simplemente enfocamos la cuestión desde este punto de vista de la seguridad nacional de Turquía», explicó Kalin, dispuesto a la negociación. El portavoz de la Casa Blanca, Jen Psaki, ha quitado hierro también a este obstáculo, declarado que «Washington trabaja para aclarar la posición de Turquía » y destacado que el proceso ha recibido ya «un amplio apoyo entre los socios» de la Alianza. Estados Unidos busca «comprender mejor la posición de Truquía», ha dicho también el portavoz del Pentágono, John Kirby, unas declaraciones que «aportan tranquilidad al proyecto», según declaraba ayer Baudin en Helsinki.

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