Hillary Clinton, en un reciente acto en Cincinatti, Ohio
Hillary Clinton, en un reciente acto en Cincinatti, Ohio - Reuters

El FBI difunde el interrogatorio a Hillary Clinton sobre los e-mails

La candidata demócrata declaró no saber dónde se encuentran algunos de los 18 dispositivos con los que envió o recibió información clasificada

El Departamento de Estado hará pública la agenda completa de la exsecretaria de Estado, que Trump cree que demostrará que favoreció a la Fundación Clinton

Corresponsal en Washington Actualizado: Guardar
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El FBI ha hecho público su interrogatorio a Hillary Clinton y un resumen de la investigación que ha llevado cabo durante meses, dentro del llamado escándalo de los emails, que apuntan a la candidata demócrata desde que se conociera que utilizó un servidor privado durante su gestión como secretaria de Estado (2009-2012), con el que recibió y remitió correos electrónicos, algunos de los cuales contenían información clasificada.

El documento de la entrevista entre el FBI y Clinton, denominado internamente por la Agencia como informe 302, recoge las tres horas en las que la aspirante a la presidencia de Estados Unidos fue cuestionada por los detalles del uso del servidor privado.

El informe difundido por el FBI concluye que la ex secretaria de Estado llegó a utilizar hasta 18 dispositivos desde los que envió (o recibió) correos electrónicos.

Durante el interrogatorio, preguntada por los aparatos, Clinton alegó que no sabía dónde estaban algunos de ellos.

De los 30.000 correos electrónicos publicados hasta ahora, medio centenar incluían información de alto secreto (ocho), secreta (36) y confidencial (ocho), según la calificación llevada a cabo por el FBI. Además, 2.000 de ellos han sido clasificados como «confidenciales». Hay un total de 14.900 que todavía no han sido difundidos.

No está claro que el escándalo de los emails vaya a ahogar a Hillary Clinton, pero sí que va a suponer un aprieto continuo hasta el mismo día de la elección presidencial. La difusión del interrogatorio y la investigación del FBI se suma a la decisión del Departamento de Estado de hacer pública su agenda completa durante los cuatro años en el cargo.

También, el hallazgo de treinta nuevos emails durante los días de la crisis de Bengasi (Libia), hallados por el FBI, y cuyo contenido no ha trascendido. También ha sido relevante la reciente decisión del juez de ordenar a Clinton que responda a las preguntas formuladas por Judicial Watch, una organización conservadora que se ha propuesto revertir la condición de favorita de la candidata.

El Departamento de Estado ha decidido rehuir la más mínima duda de parcialidad en el feo asunto de las decenas de miles de emails recibidos y remitidos por su predecesora, investigados por el FBI.

Pese a la opinión contraria de los abogados del Gobierno (Administración) estadounidense, el departamento que dirige John Kerry aseguró que a mediados de octubre entregará a Associated Press las miles de hojas que recogen la totalidad de las citas de la entonces secretaria de Estado y que la agencia de noticias ha reclamado repetidas veces, apoyándose en la ley estadounidense de Libertad de Información.

La importancia del contenido de la agenda estriba en precisar hasta qué punto parte de esas entrevistas sirvieron para facilitar aportaciones a la controvertida Fundación Clinton, principal denuncia de su rival, Donald Trump.

Hace unos días, AP informó de que su análisis de las primeras 154 hojas, entregadas como anticipo por el Departamento de Estado, más de la mitad de quienes se entrevistaron con la entonces titular de la cartera, excluyendo cargos políticos, fueron donantes de la fundación.

Múltiples frentes en torno a Clinton

En la diversidad de frentes que se van abriendo en torno al escándalo, esta vez a la luz de los miles de emails que se siguen analizando, ayer se supo que un ayudante de Hillary Clinton aceptó en 2009 facilitar a un asesor del ex presidente Bill Clinton un pasaporte diplomático especial, lo que sugiere también el acceso privilegiado a la Secretaría de Estado con que contaba la Fundación. Aunque el documento nunca llegó a formalizarse.

Como si todo fuera una serie de vasos comunicantes, la investigación también puede reabrir la polémica gestión de Clinton durante el asalto yihadista a la Embajada de Estados Unidos en Bengasi, el 11 de septiembre de 2012, en el que murieron su titular y tres funcionarios.

El FBI ha rescatado treinta emails más, cuyo contenido se dará a conocer una vez que la Agencia decida si existe contenido clasificado. Que los correos electrónicos recuperados se encuentren entre los casi 15.000 borrados por la propia Clinton, alegando que eran personales, ha despertado nuevas suspicacias.

El hallazgo se ha producido a raíz de las continuas reclamaciones de la organización conservadora Judicial Watch, que además ha logrado que el juez obligue a la candidata demócrata a responder por escrito a 25 preguntas relacionadas con el escándalo.

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