Patrick Schwarzenegger, otro Kennedy enamorado de Hollywood

La fascinación de los Kennedy por Hollywoodcomenzó con el breve reinado que Joseph P. Kennedy, el patriarca, mantuvo entre 1926 y 1930, una época en la que llevó las riendas de tres estudios; entre ellos, Empire Films. Durante esos cuatro años, cuando el cine mudo daba paso a los llamados talkies, Joseph se encaprichó con la actriz Gloria Swanson, casada en seis ocasiones.

Dejarse arrastrar por las tentaciones hollywoodienses parece ser una constante en la familia que más políticos ha gestado en la historia de EE.UU. Hasta el punto de que John F. Kennedy y su progenitor, el ya mencionado Joseph, compartieron amante: Marlene Dietrich. Pero el encuentro del asesinado presidente y la actriz alemana fue «breve y extraño», como ella misma explicó a su amigo Gore Vidal.

Marilyn, Lawford, Hines...

Amores de todo tipo han surgido entre el clan y la élite de Hollywood. Pasionales, como la aventura de JFK con Marilyn Monroe; o auténticos y duraderos, como el del actor Peter Lawford con Patricia Helen, hermana del presidente, que acabó en matrimonio. Robert Kennedy Jr., hijo de Bobby y abogado especializado en medio ambiente, se casó el pasado año con Cheryl Hines, estrella de una popular teleserie de la HBO. En 2010 su primera mujer, Mary Richardson, se había suicidado ahorcándose en su casa.

Las nuevas generaciones han «pecado» igual que lo hicieron sus padres. Así, John John se enamoró de Daryl Hannah en los años 90; y Conor, hijo de Robert y nieto de Bobby, estuvo con la cantante Taylor Swift, quien, por cierto, le ha dedicado el tema «Blank Tape».

Si hay un miembro del clan Kennedy bien enraizado en Hollywood es Maria Shriver. Hija de Eunice, sobrina de John F. Kennedy, estuvo casada con Arnold Schwarzenegger durante 28 años. Una infidelidad de él rompió el matrimonio. Tuvieron cuatro hijos: Katherine (26 años), Christina (25), Patrick (21) y Christopher (19). Y parece que los genes de los Kennedy pesan en el tercer vástago, Patrick, quien ha sucumbido a los encantos de la actriz y cantante más irreverente del momento: Miley Cyrus. El pasado 14 de febrero, día de San Valentín, el joven modelo y estudiante de la USC (Universidad del Sur de California) mostró en su cuenta de Instagram una foto donde aparecían con Miley y a la que acompañaba una frase esclarecedora: «El hombre más afortunado del mundo».

En un principio, el enamoramiento de Patrick no le hizo ninguna gracia a Maria Shriver. Según explicó un amigo de la familia a la web «Hollywoodlife», Maria se negó a invitar a Miley la pasada Navidad, lo que provocó una fuerte discusión con Patrick. Días después, el joven Schwarzenegger y la cantante se fueron de vacaciones a Hawái, donde dieron rienda suelta a su pasión.

Poco a poco Shriver ha ido cambiando su posición inicial y a finales de enero consintió en cenar con la pareja en Laurel Hardware, un conocido restaurante de West Hollywood. El encuentro sirvió para limar asperezas. El pasado viernes, Patrick y Miley acudieron a la fiesta organizada por Tom Ford para presentar su colección en Los Ángeles, pero posaron por separado en la alfombra roja

La reconquista

En realidad, este idilio no es nuevo. Oficialmente comenzó hace un año, aunque en una entrevista que Patrick concedió a la revista «Details» hace tres años dijo que tenía sus ojos «puestos en Miley». Al parecer, tuvieron un brevísimo idilio en 2011 tras el que Cyrus prefirió volver con su novio de entonces, el actor Liam Hemsworth, con quien se prometió. Sin embargo, debido a la cizaña que metió la familia de Liam, asustada ante las polémicas desatadas por Miley, llegó una sonada ruptura. Patrick aprovechó el momento para reconquistarla y desde entonces permanecen juntos contra viento y marea. «Son amigos desde hace mucho tiempo», confirman amigos de Miley. «Patrick es un gran chico. Ha crecido en Hollywood, como ella. Era cuestión de tiempo que acabaran saliendo juntos».