La pareja, en una fiesta «Flower Power» de Ibiza
La pareja, en una fiesta «Flower Power» de Ibiza - ABC

Mar Flores confirma que «Javier permanece estable, pero está muy débil»

La modelo confirma que el tratamiento de su marido contra la malaria está funcionando, aunque ha perdido muchas plaquetas

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Sin separarse de su marido, Javier Merino, se encuentra Mar Flores desde que el pasado viernes fuera ingresado por urgencias en el hospital Can Misses, de Ibiza, debido a un caso de malaria, tal y como publicó ABC el domingo. El matrimonio se llevó un buen susto cuando los primeros resultados confirmaron que padecía esta enfermedad infecciosa. Merino había llegado al centro hospitalario con un cuadro de fiebre alta y dolores; cuando comentó con los médicos que solía viajar a Sudán o Kenia por motivos de trabajo, en seguida se puso en marcha el protocolo de posibles enfermedades infeccionas. Desde entonces permanece ingresado en el citado hospital hasta que pase el periodo de observación.

La madrugada del domingo a lunes fue muy mala.

«Javier se ha quedado muy débil, ha perdido muchas plaquetas y van a tener que hacerle una transfusión de sangre», ha confirmado la propia Mar, quien habla a diario con los médicos. «El tratamiento contra la malaria está funcionando, pero él aún no está fuerte y por eso seguirá en observación hasta mañana (hoy)», comentó. Una vez que abandone el hospital, la idea es trasladarse a su casa de Ibiza donde seguirá cogiendo fuerzas, para después, viajar a Madrid y retomar su vida diaria.

Celebración truncada

Lo más curioso es que el matrimonio Merino-Flores había elegido este fin de semana para viajar solos con el fin de celebrar en la intimidad su decimoquinto aniversario de boda. Por eso, en esta ocasión sus hijos se quedaron en Madrid. «No íbamos a hacer nada especial. Simplemente, el hecho de estar los dos juntos era suficiente», confiesa Flores. Por el contrario, la cena romántica se ha convertido en un rosario de noches de insomnio y nervios, y más en estos momentos de psicosis colectiva en todo lo relacionado con enfermedades de otros orígenes.

Hay que recordar que la malaria se propaga por la picadura de un mosquito, que es una enfermedad infecciosa, aunque no contagiosa entre humanos, que tiene cura y que dentro de los diferentes tipos, la que padece Merino es la más leve. «Los médicos nos han tranquilizando. Dicen que hemos tenido suerte, ya que es malaria de tipo cuatro, plasmodium ovale. Se supera con un tratamiento de fármacos, que, tras una primera fase en vena, puede ser a través de medicamentos orales. Además, es de las que no suele dar más brotes, como sí ocurre con otros tipos de malaria».

Ayer, al cierre de esta edición, aún estaban pendientes de los resultados de las últimos test que se le habían realizado para comprobar su evolución definitiva. Mar confía en que hoy o mañana puedan instalarse en su casa.

Tal y como explica la propia modelo y actriz, el hecho de que Javier viaje en múltiples ocasiones a esos países de África hace inviable que cada dos por tres se someta al tratamientos preventivo de pastillas contra la malaria. «Si viajara de vez en cuando, podría tomar la medicación recomendada como profilaxis, pero tampoco se puede hacer siempre. Esos medicamentos son muy fuertes y podrían dañar otros órganos».

Ver los comentarios