El Gobierno vasco aplaude la liberación de los detenidos en Francia por custodiar armas de ETA

El Gobierno vasco se mostró satisfecho con la puesta en libertad de las cinco personas arrestadas el pasado domingo en Francia por custodiar armas de ETA. El portavoz del Ejecutivo autonómico, Josu Erkoreka, destacó que se trata de una «noticia positiva», pues, a su juicio, los detenidos no tenían intención de cometer delitos, sino de «colaborar en el desarme» de la banda terrorista: «Creo que las primeras pesquisas del juez apuntan en esa dirección -destacó-, y es bueno que haya correspondencia entre la percepción social mayoritaria y las resoluciones judiciales».

Según el dirigente nacionalista, la voluntad de los arrestados, que el pasado martes quedaron en libertad con cargos, no era «en absoluto» la de «participar en una trama terrorista encaminada a la perpetración de atentados», sino la de «colaborar en el desarme de ETA».

De esta forma, pretendían ayudar a «distender el ambiente» en el territorio vasco y, a su vez, a «facilitar las cosas de cara a un fin ordenado de la violencia».

En este sentido, Erkoreka recordó que el Ejecutivo autonómico mantiene vigente la propuesta que hizo a los terroristas en 2014, que plantea un desarme «objetivo, ordenado y verificable» que «reportaría beneficios importantes» para ambas partes. Además, añadió que la operación, que ha sido «desdeñada» por ETA, contaría con la supervisión «jurídica, competencial y política» del la administración vasca, que actuaría «de manera suficientemente calculada y medida».

Críticas

La posición del Gobierno autonómico fue duramente criticada por el resto de fuerzas políticas, que acusaron a Íñigo Urkullu de querer «ponerse medallas» en el proceso de desarme en lugar de asumir «compromisos serios en favor de la solución». El portavoz de la dirección de Sortu, Arkaitz Rodríguez, declaró a EiTB que las palabras de los nacionalistas «no son serias», pues «vienen a decir que ETA debía entregar las armas a la Ertzaintza y que la Ertzaintza las pondría en manos de la Guardia Civil».

Por su parte, la secretaria general del PP vasco, Nerea Llanos, destacó que no entiende la razón por la que el equipo de Urkullu, que representa la «máxima autoridad» en la Comunidad Autónoma, pidió la libertad de los arrestados «cuando previsiblemente esas personas han sido detenidas por colaborar con una banda armada». A su vez, añadió que ETA debe «anunciar unilateralmente su disolución» sin «teatros» ni «escenas propagandísticas».