Antonio Dieter Moure y José Antonio Vázquez Freire, ayer durante la rueda de prensa ofrecida en la CEG
Antonio Dieter Moure y José Antonio Vázquez Freire, ayer durante la rueda de prensa ofrecida en la CEG - EFE

La CEG confirma el apoyo sin fisuras de la banca y defiende su viabilidad

La nueva directiva de la patronal cifra en un 300 por cien el ahorro en gastos generales

Santiago Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

La Confederación de Empresarios de Galicia (CEG) no está dispuesta a dar la batalla por perdida, pese a que las noticias que apuntan a un recrudecimiento de la división interna no favorezcan, más bien todo lo contrario, la negociación abierta con las entidades bancarias. La nueva directiva de la patronal gallega, que cifró en un 300 por cien el ahorro en gastos generales, confía en que superarán la crisis financiera. Así lo afirmaba ayer su presidente, Antonio Dieter Moure, quien salía al paso de las informaciones publicadas estos días en los medios de comunicación sobre la falta de apoyo de las entidades financieras al plan de viabilidad. En este sentido, el presidente de la comisión económica de la entidad, José Antonio Vázquez Freire, señaló que el respaldo de la banca es al 100% y calificó de «clave» el papel de Francisco Conde, conselleiro de Economía, en todo el proceso.

«Nuestro objetivo es ocupar el espacio que nos corresponde, ser una organización líder a nivel nacional y defender al tejido empresarial. Así lo entiende la banca», aseguró Vázquez. Por su parte, Dieter Moure, quien habló de «filtraciones interesadas» a la prensa, negó su intención de dimitir, tal y como también se llegó a afirmar. «Reconozco que, por una cuestión de responsabilidad, lo valoré a nivel personal, pero no lo comenté con nadie», dijo, para puntualizar que «en todo caso, si yo soy el problema me echaré a un lado».

Sobre la negociación abierta con la banca, en relación al préstamo de 1,2 millones de euros que necesitaría la organización empresarial para hacer frente a los pagos comprometidos, entre ellos las nóminas, Moure aclaró que «va por buen camino». «Estamos en el tira y afloja común a este tipo de procesos», indicó, para defender que la CEG es «viable y fiable». «El plan de viabilidad es algo vivo y, como tal, puede sufrir modificaciones», reconoció el presidente de la patronal. El documento aprobado el pasado mes, en junta y asamblea, contempla 8 despidos sobre una plantilla de 21 trabajadores y una rebaja de sueldos como vía para negociar la nueva financiación con las entidades bancarias.

La banca acreedora —Abanca, Popular, Sabadell, Santander y BBVA— exigía, según fuentes consultadas por ABC, que el plan obtuviera el mayor respaldo posible, acreditando así la solvencia de la entidad, como paso previo a renegociar la hipoteca que pesa sobre la sede de la compostelana Rúa do Vilar. Un préstamo que, según apuntó Moure, podría estar cerrado a principios del mes de septiembre.

En cuanto a qué ajustes sería necesario abordar para convencer a la banca, el presidente de la CEG confirmó que «todavía no se ha llegado a ese nivel de detalle», y apuntó que uno de los principales puntos a tratar será «el tiempo de la hipoteca».

Varias vías de ingresos

En todo caso, confirmó que las nóminas del próximo mes están garantizadas, pues anunció que están a punto de cerrar unas «pólizas de crédito» con las que la confederación no solo hará frente a los pagos a sus trabajadores, sino que saldará la deuda con el Igape. El organismo dependiente de la Consellería de Economía le reclama 600.000 euros de los 4 millones gestionados por la Plataforma Empresarial en el Exterior (Pexga) por gastos no justificados. Respecto a esta partida, Moure explicó que han logrado que una entidad bancaria —no quiso especificar cuál— les adelantara la cantidad con cargo a la partida que les corresponde de la ley de participación institucional.

La citada normativa, tal y como recordó este jueves el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, preguntado al respecto de la situación de la CEG, recoge ayudas institucionales a las que tendrá derecho «en cuanto acredite el cumplimiento y desembolso en gasto de importes similares».

Ya por último, preguntados ambos por la postura del sector crítico, negaron que respecto a la situación actual haya división interna y defendieron que, en este caso, «estamos todos a una». Pontevedra, Lugo y Orense no ocultaron ser partidarios de una mayor reestructuración a la contemplada en el diseño de Dieter Moure.

Ver los comentarios