Vídeo: el pequeño Osman deja atrás el infierno del campo de refugiados

La pesadilla de Osman y sus padres ha acabado a las siete y 37 minutos de la tarde de este martes. En poco más de un mes, el pequeño afectado de parálisis cerebral ha pasado de malvivir «en condiciones inhumanas» en el infierno del campo de refugiados de Idomeni a pernoctar en el centro de atención de Mislata en Valencia. El niño afgano aterrizó junto a su familia en el aeropuerto Adolfo Suárez de Madrid.

Un vehículo de Cruz Roja le trasladó a Valencia y este miércoles se le someterá a una valoración inicial en una unidad especializada del Hospital La Fe, en la que se determinará el tipo de tratamiento que requiere. Además, tanto Osman como su familia recibirán asistencia psicosocial, sanitaria, educativa y formativa para facilitar su integración social.

El pequeño voló desde Atenas, ciudad a la que llegó hace tres días en una situación muy delicada, con apenas ocho kilos de peso y constantes crisis epilépticas. Para huir de la guerra en su país, Osman tuvo que superar junto a sus padres y sus dos hermanos un tortuoso viaje hasta Turquía y después a través del Mediterráneo para alcanzar Europa. En abril llegaron al campo de refugiados de Idomeni, situado entre Grecia y Macedonia, donde los voluntarios de la ONG Bomberos en Acción advirtieron el grave riesgo que sufría la vida del menor. Según relatan los cooperantes que le han acompañado, el menor estaba atenazado por el calor diurno, el frío nocturno y el «humo constante de las hogueras». El niño convivía con los «gases lacrimógenos» y corría riesgo de morir.

Fue precisamente esta ONG la que promovió a través de la plataforma Change.org una campaña para solicitar asilo para ellos al Gobiernol.

El Ministerio de Exteriores cursó la petición, apoyada por más de 166.000 personas, el pasado 4 de mayo. Después de que el menor reciba atención médica, Osman y su familia se trasladarán a Elche, donde se les facilitará una vivienda.