Imagen de una caseta inspeccionada por los agentes de la Guardia Civil en la localidad valenciana de Manuel EFE

D. V.

Cerca de treinta efectivos de la Guardia Civil han retomado este miércoles la búsqueda del cuerpo sin vida de Marta Calvo en un pozo ubicado junto a una casa abandonada en el término municipal de Senyera , concretamente en la carretera comarcal CV-562 que une las localidades valencianas de Manuel y Villanueva de Castellón.

Fuentes de la investigación aseguran que las tareas de búsqueda se han reanudado en una zona muy concreta, cuyo operativo está formado por agentes del Grupo de Rescate e Intervención en Montaña (GREIM), del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS), de Tráfico, del Grupo Cinológico con perros adiestrados, así como de Homicidios y de la UCO.

La Guardia Civil inspecciona este miércoles en Senyera una casa de campo abandonada hace más de siete años, en cuyo interior se encuentra un pozo de sesenta metros de profundidad. La treintena de agentes se desplazaron a este lugar tras las declaraciones de una mujer, que en su momento observó a un sospechoso cuando transitaba por estas inmediaciones.

Una parte de la casa había sido tapiada recientemente, por lo que los efectivos han tenido que derribar la pared de ladrillo para acceder a ella e introducir el material necesario para llevar a cabo las labores de búsqueda del cuerpo sin vida de la joven.

De acuerdo con el operativo de búsqueda previsto por la Guardia Civil, si el rastreo con cámaras en el interior del pozo no ofrece resultados, se examinarán diferentes puntos del tramo de la carretera comarcal CV-562, entre los que se encuentra una caseta en desuso, acequias, cañares y parte de arcenes cubiertos por arbustos y zarzas.

Los trabajos de rastreo se retomaron el martes después de dos semanas

La búsqueda del cadáver de Marta Calvo se retomó el pasado martes en el término municipal de Manuel , quince días después de que se suspendieran los trabajos de rastreo sin éxito en un vertedero ilegal próximo a dicha localidad de Valencia .

La joven desapareció en noviembre de 2019 en Manuel, lugar donde residía su presunto asesino, tras haber mantenido un contacto sexual con él. Tras su detención, Jorge Ignacio, confesó que la chica falleció de manera accidental durante un episodio de relaciones sexuales y consumo de cocaína, y que posteriormente descuartizó el cuerpo y distribuyó los restos por diferentes contenedores.

Durante la jornada del martes, la delegada del Gobierno en la Comunidad Valenciana , Gloria Calero, subrayó que la investigación de la Guardia Civil sobre la desaparición y muerte de Marta Calvo «no ha parado en ningún momento» y que los agentes trabajan de acuerdo con la aparición de nuevos indicios. «La situación es muy compleja y dolorosa», añadió.

En paralelo, el juez de Instrucción número 20 de Valencia citó a declarar a la madre de Jorge Ignacio, presunto asesino de la joven, el próximo 15 de octubre a las diez de la mañana. La progenitora del investigado tendrá que acudir a tomar declaración en calidad de testigo, después de que algunas de las acusaciones personadas en el procedimiento solicitaran al juez su testimonio, debido a las recientes contradicciones detectadas por los forenses.

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