Las diputaciones provinciales, las administraciones más saneadas de España

Las diputaciones provinciales son las administraciones más saneadas de España. Llevan en el disparadero del debate político desde hace meses, a raíz de que Ciudadanos convenciera al socialista Pedro Sánchez para pactar su supresión. Sin embargo, el estado financiero de estas instituciones es el menos preocupante de todo el entramado público nacional.

Entre las 38 diputaciones de régimen común suman actualmente unos 1.900 millones de euros de deuda financiera. Supone apenas el 0,18% de todo el endeudamiento público del país, que asciende a más de un billón de euros.

Además, con mucha diferencia han sido las únicas capaces de reducir drásticamente su deuda pública en los últimos años. Las autonomías y la Administración del Estado la han seguido aumentando, pero el endeudamiento de las diputaciones provinciales se ha reducido prácticamente tres años.

A finales de 2012, la deuda financiera de las 38 diputaciones de régimen común llegó a rozar los 3.600 millones de euros, pero a finales del año pasado se había reducido hasta los 1.848 millones, según los datos certificados por el Banco de España.

La Administración del Estado acumula una deuda financiera de 775.600 millones de euros en números redondos; las comunidades autónomas algo más de 261.000 millones; y las entidades locales unos 35.000 millones de euros.

De esos 35.000 millones de euros de endeudamiento que tienen las entidades locales españolas, el grueso –29.000 millones- corresponde a los ayuntamientos. Solo entre los ayuntamientos de las cinco mayores capitales españolas –Madrid, Barcelona, Sevilla, Valencia, Zaragoza y Málaga– suman una deuda financiera de casi 8.400 millones de euros, más de cuatro veces la que tienen entre todas las diputaciones provinciales del régimen común –que son todas excepto las diputaciones forales vascas y los cabildos y consejos insulares de Canarias y Baleares–.

Las corporaciones provinciales en su conjunto acumulan actualmente un endeudamiento de unos 5.800 millones de euros. Pero la mayor parte se concentra en las diputaciones forales vascas, justo las que Ciudadanos y el PSOE no se plantearon suprimir en ningún caso cuando pactaron, hace unos meses, la eliminación de corporaciones provinciales en España, eliminación de la que también dejaron al margen a los cabildos y consejos insulares.

Las tres diputaciones vascas concentran un endeudamiento de unos 3.300 millones de euros, según los datos certificados por el Banco de España al cierre del último ejercicio. El grueso de esa deuda lo tiene la diputación de Vizcaya, con una deuda financiera de casi 2.200 millones de euros.