Mañana de gobierno, tarde de partido

Veinte días de rumores y especulaciones sobre la crisis de Gobierno (poca) y de partido (bastante) a las que Mariano Rajoy se ha visto forzado por el varapalo del 24-M se terminan al fin mañana. Habrá jornada matutina, que el presidente usará para hacer algún cambio en su Gabinete, y vespertina, en la que, reunido con su Ejecutiva, dotará a este de más músculo para afrontar las elecciones generales de noviembre.

Esto es lo poco que saben los directos colaboradores de Rajoy, que solo dan por hecho que los nombramientos relativos al Gobierno se efectuarán desde Moncloa, no desde Génova, una vez que previsiblemente el presidente se los comunique al Rey esta tarde. A falta de horario concreto, suponen que el anuncio se llevará a cabo el jueves

por la mañana para que los nuevos ministros tomen posesión antes de comenzar el Consejo del viernes.

Lo demás son especulaciones, que apuntan a muy pocos cambios en el Ejecutivo: la vacante que se cree va a dejar José Ignacio Wert, que se quiere ir con o sin embajada en la OCDE; la posible salida en dirección a Cataluña de Jorge Fernández y la tan rumoreada designación de un nuevo portavoz del Gobierno. Para Educación suenan los nombres de Javier Arenas, María Dolores de Cospedal o cualquiera de los secretarios de Estado a los que Rajoy quiera regalar un ascenso de última hora.

Como posibles portavoces se barajan Alfonso Alonso y José Manuel Soria. Si se produce la vacante de Interior está cantado que el puesto será para el secretario de Estado actual, Francisco Martínez. Después de la insistencia de Rajoy en avisar que no cambiará su política económica la opinión general es que se mantendrán a los ministros del ramo: Luis de Guindos, que desde Economía opta a la presidencia del Eurogrupo y Cristóbal Montoro, dedicado ahora a exigir rigor presupuestario a los nuevos ayuntamientos.

Rajoy reserva los grandes cambios para el partido, aunque se da por hecha la continuidad de Cospedal como secretaria general. Los últimos rumores apuntan al desembarco de pesos pesados del Partido Popular y del Gobierno en la estructura de Génova, como se estilaba en la época de Aznar con Rato, Rajoy y Mayor Oreja como vicesecretarios además de ministros.

Los más nombrados para reforzar la estructura de Génova son Alberto Núñez Feijóo, Ana Pastor, José Manuel Soria, Cristina Cifuentes, Alfonso Alonso o Pío García Escudero, además de un portavoz , trabajo que se da por asignado a Pablo Casado.