El presidente del grupo bancario español BBVA, Francisco González, duran
El presidente del grupo bancario español BBVA, Francisco González, duran - efe

BBVA elimina las cláusulas suelo de las hipotecas de Catalunya Banc

La entidad catalana tenía préstamos hipotecarios por un valor próximo a los 20.000 millones de euros

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Los clientes que decidan hipotecarse con BBVA, pero a través de Catalunya Banc -ahora de su propiedad-, están de enhorabuena. La entidad que preside Francisco González ha decidido eliminar de los contratos de este tipo de préstamos las polémicas cláusulas suelo. De hecho, desde esta misma semana, la entidad catalana comercializa un nuevo producto, una hipoteca al 1,5%, en la que especifica que lanza «sin cláusula suelo». Una decisión que, según ha podido saber ABC, lleva sopesando un año, al mismo tiempo que hace números para eliminar, con efectos retroactivos a mayo de 2013, todas las cláusulas suelo de los contratos de la antigua caja catalana, tal y como hizo con sus propias hipotecas.

Según cifras oficiales de Catalunya Banc

a cierre del ejercicio 2013, la entidad catalana tenía préstamos hipotecarios por un valor próximo a los 20.000 millones de euros. Año a partir del cual dejó de constituir hipotecas con esta limitación en los contratos. BBVA tuvo que acatar el fallo del 9 de mayo de 2013 del Tribunal Supremo que le obligaba a dejar de aplicar la cláusula suelo desde ese mismo día. El Alto Tribunal declaró esta cláusula ilícita, fundamentalmente, por su falta de transparencia, lo que afectó a un total de 425.000 créditos a partir de entonces. También declaró ilegales los suelos de Cajamar y de Novagalicia Banco. Según estimaciones de BBVA, el 12% de las hipotecas del banco adquirido cuenta con esta polémica cláusula.

El ERE, provisionado

Una medida que coincide en el tiempo con el anuncio de las cifras del expediente de regulación de empleo (ERE) para 2.000 empleados de la caja catalana, además del cierre de 400 oficinas, que contrastan con las primeras previsiones, que anunció el ya ex consejero delegado, Ángel Cano, el pasado mes de abril. Entonces Cano dijo que el ajuste afectaría al 20% de la red de oficinas y de la plantilla, lo que supondría el cierre de unas 285 oficinas y la supresión de unos 1.700 puestos de trabajo de la red conjunta en Cataluña, y no únicamente de la red de la caja catalana como ahora se ha decidido.

BBVA tiene también en estudio la cantidad a destinar en el ajuste laboral. Fuentes financieras aseguran que ambas cantidades están ya provisionadas, gracias a los beneficios que le ha reportado la compra de Catalunya Banc, cuyo precio estuvo por debajo del valor en libros. El banco compró la entidad por 1.187 millones de euros y recibió del FROB alrededor de 400 millones para cubrir contingencias.

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