Cambios de escudos: ¿modernidad o traición a la tradición?

En los últimos años son numerosos los clubes de fútbol que están modificando los escudos que conocieron sus aficionados durante décadas. Equipos como la Juventus o el Manchester City emprendieron un camino que en España han seguido conjuntos como el Atlético de Madrid y más recientemente el Deportivo Alavés. Una tendencia a la que se ha sumado el Inter de Milán , que acaba de presentar su nuevo escudo entre críticas de sus seguidores más tradicionales. Unas protestas que ya se vivieron cuando otros clubes decidieron romper con el pasado. (Los cambios de escudo más polémicos)

La ejecución de los cambios de escudo suelen resultar impecables si el objetivo es tener más presencia visual en las redes. Las explicaciones técnicas por parte de todo tipo de diseñadores y publicistas coinciden en afirmar que con los cambios de escudo se hace «avanzar a las marcas» y que resultan «más fáciles de reproducir», lo que permite «llegar a audiencias globales».

Pero el fútbol es sentimiento y muchos aficionados se resisten a lo que entienden como una pérdida de identidad. Aunque hace ya unos años de la modificación en su emblema, seguidores del Atlético de Madrid continúan realizando frecuentemente protestas por el cambio de su escudo y reclamando la recuperación del anterior. «El escudo no se toca» es el grito desde el corazón que se podía oír en los alrededores del Estadio Wanda Metropolitano antes de la interrupción del fútbol por la pandemia.

En el caso del Inter, último equipo que ha cambiado su escudo , la modificación ha resultado más dolorosa para muchos de sus fieles porque también ha variado su nombre. El Football Club Internazionale Milano ha dejando de ser Internazionale para pasar a denominarse a secas Inter Milano (Inter Milán). Cambios motivados porque Suning, la propiedad china del Inter, considera que este cambio de cara permitirá conseguir nuevos inversores en un momento delicado por la crisis financiera.