Aparece en la Biblioteca Nacional la desconocida comedia política de la que Lope de Vega renegó
Su título ni siquiera figuraba en las listas y documentos en que se mencionan las obras del dramaturgo pendientes de localizar
Nadie sabía de su existencia. Ni siquiera su título figuraba en la lista de obras perdidas de Lope de Vega . Sin embargo, un estudio reciente acaba de dar con ella. Se trata de ‘Yo he hecho lo que he podido, Fortuna lo que ha querido’, una comedia desconocida del Fénix de los Ingenios, que acaba de ser identificada por Abraham Madroñal , catedrático de Literatura Española de la Universidad de Ginebra.
La edición princeps del texto (la primera edición) se encuentra en la Biblioteca Nacional de España (BNE), y podría fecharse entre 1632 y 1634, es decir, poco antes de la muerte del dramaturgo, acaecida en 1635. Es una copia pirata, y está falsamente atribuida a un tal Miguel Bermúdez, un actor y escritor ocasional del que poco se sabe, más allá de que su calidad literaria es más bien escasa. En los archivos de la institución, por cierto, figuran otros dos ejemplares de la obra, impresos en Sevilla ya en el siglo XVIII, con la misma firma. Se trata de algo rarísimo, sobre todo si tenemos en cuenta que en esta época lo común era atribuirle a Lope comedias que no eran de él (eso hicieron con ‘La vida es sueño’), y no al revés. ¿Por qué, entonces, se hizo esto con ‘Yo he hecho lo que he podido, Fortuna lo que ha querido’?
La clave del misterio está en el contenido del texto, que tiene una fuerte carga política . En él Lope de Vega hace una defensa de Gonzalo Fernández de Córdoba, nieto del Gran Capitán y hermano del Duque de Sessa, protector y mecenas del literato. Este hombre estaba siendo juzgado por el mismísimo Felipe IV debido a su fracaso en la guerra de sucesión de Mantua y el Monferrato, y la intención de Lope, claro, era echarle un cabo. Al final, el asunto salió mal, y la hipótesis de Abraham Madroñal es que el autor decidió desentenderse de este título, por los problemas que pudiera traerle.
«Con esta obra, Lope intenta recordarle al rey y al Condeduque de Olivares lo que le debían a esta familia. A estos no debió de parecerles bien, y por eso se desentendió del texto. Yo creo que esa es la razón por la que aparece firmada por Miguel Bermúdez», comenta Madroñal al otro lado del teléfono.
Estilometría computacional
La atribución de este texto a Lope se ha conseguido gracias al análisis estilístico del mismo. Para empezar, la inusual métrica de los versos es idéntica a la que usaba el genio por aquellos años, en su etapa final. También había versos sacados de otras obras de Lope, como ‘La Dorotea’ , e incluso había fragmentos calcados del manuscrito del Códice Pidal . Había más indicios de que la autoría de Bermúdez era falsa, pero la prueba concluyente llegó a través de la tecnología.
Desde hace unos años, Álvaro Cuéllar y Germán Vega trabajan en el campo de la estilometría computaciona l, que desarrollan dentro del proyecto ETSO. Ellos manejan una herramienta capaz de comparar una obra de teatro del Siglo de Oro con un corpus de más de dos mil setecientas comedias, para así encontrar afinidades estilísticas. Cuando se analizó ‘Yo he hecho lo que he podido, Fortuna lo que ha querido’ con este programa se descubrió que los cien textos más parecidos a este eran todos de Lope de Vega. Blanco y en botella...
«Lo que hacemos es analizar estadísticamente el léxico más frecuente. No importan tanto las palabras específicas, con sentido, como las palabras que más se repiten: los conectores, los artículos, los pronombres. Este era un impreso desconocido hasta ahora, que indefectiblemente es de Lope de Vega », asevera Germán Vega, en conversación con ABC.
Han sido varias ya las comedias de Lope identificadas con esta tecnología, y llegarán más, sin duda. «En estos momentos estamos investigando mucho. Gracias a la estilometría computacional irán apareciendo más obras de Lope en los próximos meses. Hay títulos que están mal atribuidos, como este, y otros que directamente no tienen autor, y que podrían ser de él, también», remata Vega.
