Poetas de hoja viva

El ministro de Cultura de Costa Rica, Manuel Obregón, y la alcaldesa de Cádiz , Teófila Martínez, inauguraron ayer en el Parque Genovés la instalación sonora 'Árboles parlantes: Voces de Costa Rica', en la que podrá escucharse la poesía de cinco escritores costarricenses.

Julieta Dobles, Osvaldo Sauma, Ana Istarú, Mauricio Molina y David Cruz, seleccionados por el Ministerio de Cultura costarricense, protagonizan estas piezas sonoras, que se reproducen en bucle acompañadas de un material divulgativo en formato impreso aparejado a cada árbol, con detalles acerca del país, del proyecto y de cada uno de los autores. El funcionamiento de la muestra, producida por el Otoño Cultural Iberoamericano de la Fundación Caja Rural del Sur, la Fundación Carlos Edmundo de Ory y el Centro Costarricense de Producción Cinematográfica, es ecológico, ya que cada árbol funciona con baterías recargables por medio de la luz solar.

De ese modo, según los organizadores, «la instalación pretende recordar el valor medioambiental de los árboles pero también su romanticismo, su misterio o la belleza y la frescura que aportan a las ciudades».

La iniciativa forma parte del I Festival Iberoamericano de Poesía, que arrancó el pasado día 20 en la ciudad, con el objetivo de «difundir, reforzar y poner en valor la identidad y el patrimonio intelectual y literario acuñado a ambos lados del Atlántico», según afirman en el programa sus organizadores. Lecturas, debates y mesas redondas se han sucedido estos días en Cádiz con la participación, además de poetas costarricenses, de escritores cubanos, como José Pérez Olivares y Manuel Díaz Martínez, argentinos, como Marcos-Ricardo Barnatán y Noni Benegas, chilenos y españoles.