Sociedad

Los 'castells' estudian incorporar nuevas medidas de seguridad

La coordinadora quiere que los hombres de la base lleven una 'armadura' con un airbag que saltaría en caso de accidente

BARCELONA. Actualizado: Guardar
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La Coordinadora de Colles Castelleres de Catalunya (CCCC), la entidad que agrupa a las 60 organizaciones que se dedican a la construcción de torres humanas, trabaja desde hace un tiempo en el diseño de nuevas medidas que hagan más segura la actividad declarada en 2010 patrimonio de la humanidad por la Unesco. Aunque desde las mundo de los 'castells' afirman que el número de siniestros cada vez es menor, a pesar de que el número de 'colles' (serían como clubes y la mayoría de ellos representa a un pueblo o un barrio) va en aumento, los dos últimos accidentes ocurridos esta temporada, el domingo pasado en Barcelona y el lunes, en Tarragona, no han hecho si no apremiar la necesidad de que la manifestación castellera aplique reformas que reduzcan los peligros de la actividad, partiendo de la base que el riesgo cero es imposible.

Tras la muerte de una niña en 2006, al caerse de una torre de nueve pisos, el sector tomó una decisión inédita en los 200 años de tradición: los pequeños que escalan hasta lo más alto de las construcciones humanas deben ponerse casco. El segundo paso para mejorar la seguridad fue colocar suelos atenuantes y redes en los entrenamientos y el siguiente avance tendrá en cuenta a los forzudos que sujetan la base.

La coordinadora ultima la introducción de una especie de tejido especial, tecnología punta aplicada a sus vestimentas, que actuaría para amortiguar la caída de una torre. Sería como una armadura, un dispositivo inteligente que se activaría de manera automática en caso de accidente. Saltaría como un airbag e inmovilizaría la zona del cuello, como en las camillas que usan los servicios de emergencia en carretera. Sería muy útil para casos como el del hombre que resultó herido de gravedad por una lesión medular el domingo en Barcelona. El casteller recibió un fuerte impacto, ya que formaba parte de la base de una torre de ocho plantas y cinco personas por piso que se desplomó en las fiestas de Gracia.