El carril bici aún no ha sido recepcionado y su ordenanza entrará pronto en vigor

Una vez terminen de realizarse las labores de pintado que se están llevando a cabo y se certifique que no hay más problemas, el Ayuntamiento recepcionará la obra del carril bici, que ha costado más de un millón de euros y que ha estado rodeada por la polémica desde el principio, ya que la oposición ha criticado tanto su planificación como su ejecución. Pero, el Ayuntamiento está convencido de sus posibilidades y espera que poco a poco los usuarios de las bicicletas utilicen cada vez más estas vías que ya recorren y unen la ciudad de uno al otro extremo.

Por ello está agilizando los trámites para la entrada en vigor de una ordenanza que lleva un año a la espera de convertirse en realidad. Un documento que determinará las infracciones por no hacer un buen uso de esta vías y que regirá la circulación de las bicicletas por el municipio. La intención es que pueda aprobarse de manera definitiva para este o como muy tarde el próximo pleno municipal.

Según la ordenanza municipal de Circulación de Peatones y Ciclistas, caminar de forma prolongada por el carril bici le va a salir caro al peatón, que tendrá que estar atento para no invadir el espacio reservado para este vehículo. Una infracción catalogada como leve y que puede acarrear hasta una multa de 100 euros. El problema es que en San Fernando hay lugares en los que las personas se han acostumbrado a pasear o hacer deporte en espacios reservados para las bicicletas, mientras que existen calles en las que el peatón se ve obligado a caminar de forma prolongada por el vial verde que se ha extendido a casi toda la ciudad.

Por otro lado, si un ciclista coge por una vía peatonal se considera una infracción grave y la multa puede llegar a los 200 euros. En este sentido el espacio reservado para las bicicletas por la calle Real es el centro de la vía, es decir, la plataforma tranviaria que por el momento no compartirán con el tranvía.