El papel de Almunia

Lo que menos podía esperarse ahora es que el vicepresidente y comisario europeo de la Competencia vertiera opiniones a todas luces negativas sobre la situación económica de España y el estado de sus entidades financieras. A poco que se conozca el entresijo del funcionamiento del Colegio de Comisarios, cuya misión es velar para que los países de la UE no se hagan competencia entre sí y se comporten lealmente unos con otros, resulta sospechoso en extremo que Almunia, no solo no defienda al país del que procede sino que siembre dudas con sus declaraciones sobre la posibilidad de que no se ayude a los bancos en apuros y se opte por liquidarlos sin más. Viniendo de donde vienen estas aseveraciones no resultará extraño que se acrecienten las dudas sobre nuestra solvencia.