La competencia y la crisis recortan los ingresos de Vodafone España

La crisis y la competencia pasaron factura a Vodafone España. En el último año fiscal -que abarca desde abril de 2010 a marzo de 2011, ambos incluidos-, los ingresos por servicios alcanzaron 6.042 millones de euros, un 6,4% menos que en el periodo anterior. En la presentación de resultados del grupo británico se dio cuenta de la realización de un ajuste contable que restó 3.389 millones de euros al valor de su filial en España. De acuerdo con los principios exigidos por la contabilidad británica, también mermó el valor de las filiales italiana, irlandesa, griega y portuguesa.

El gigante de la telefonía obtuvo en el ejercicio fiscal un beneficio de 9.145 millones de euros (7.968 millones de libras esterlinas), cifra que supone un recorte del 7,8%. Las ganancias se redujeron a pesar de que la facturación ascendió a 52.660 millones de euros, un 3,2% más. Un entorno competitivo desafiante y un momento económico delicado condicionan estos resultados, explicó el consejero delegado de la compañía, Vittorio Colao.

En la presentación de resultados de Vodafone España el presidente, Francisco Román, explicó que el menor precio de la voz móvil, asociado a unas tarifas más atractivas y al impacto de la regulación fueron las causas del descenso en los ingresos por servicios. También detalló una evolución distinta entre el primer y el segundo semestre del ejercicio fiscal. El retroceso fue más acusado hasta el verano de 2010, y se atenuó desde entonces.

Pese al difícil contexto, Vodafone España no se plantea reducir plantilla, sino proseguir con el ajuste de costes, declaró el presidente, Francisco Román.

La operadora explicó también que el pasado marzo llevó a cabo la desconexión de 400.000 clientes de prepago. Lo hace cada año, y responde a la existencia de miles de usuarios, muchos de ellos turistas, que contratan un teléfono durante su estancia en España en vacaciones.

Excluida esta actuación, Vodafone aumentó en España en 143.000 su base de clientes de telefonía móvil en el trimestre enero-marzo de este año. Una evolución que le permitió alcanzar, por primera vez en el año fiscal, un saldo neto en la portabilidad de los móviles por contrato, así como un resultado positivo superior a los 250.000 clientes en la 'mudanza' del fijo. La compañía ofrece unos cálculos que discrepan de los registros de la Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones porque el regulador «no contabiliza los traspasos a la red móvil de quienes migran conservando el mismo número fijo».

El detalle de los últimos tres meses revela que los ingresos por servicios obtenidos por la operadora se situaron en 1.318 millones de euros, un 5,9% menos que un año antes. Pero las ventas correspondientes a datos móviles experimentaron un crecimiento del 17%, la tasa más elevada en seis trimestres. En concreto, se confirma la gran esperanza del desarrollo estratégico de la compañía, porque los ingresos de internet móvil registraron una expansión del 47,8% en el trimestre. Es el reflejo del auge de los smartphones -teléfonos especialmente adaptados a la transmisión de datos- y de la aceptación de las tarifas planas ofertadas para este tipo de dispositivos.

Por otra parte, Vodafone -un operador tradicional del móvil- sigue en la pelea por hacerse un hueco en la banda ancha fija. Su base de clientes ADSL aumentó en 37.000 en el primer trimestre de 2011 hasta alcanzar un total de 779.000 usuarios. El crecimiento de la cartera compensó la caída de precios, de manera que los ingresos de este segmento se incrementaron un 2,9% frente al mismo periodo del año anterior.