Las botellas de manzanilla son una de las estampas más conocidas de la Feria de Abril. :: L. V.
Jerez

El vino empieza a correr

La manzanilla La Guita maneja buenas previsiones de ventas de botellas en la primera feria del calendario, la de Sevilla

JEREZ. Actualizado: Guardar
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El aire de la primavera ya huele a feria en Andalucía, sobre todo porque es este fin de semana cuando dará comienzo el tradicional festejo de abril en Sevilla, que es el pistoletazo de salida para el calendario ferial de toda la comunidad. Sin ir más lejos, justo cuando el alumbrado se esté apagando en el Real sevillano las luces empezarán a lucir en la Feria del Caballo de Jerez, y acto seguido el de El Puerto... y así hasta después del verano.

Y tan tradicional como el encendido de los recintos feriales es el aumento del consumo de los vinos del Marco de Jerez que en estas fechas, y sobre todo si la climatología acompaña y lo que llegan son días no excesivamente calurosos, tienen su principal periodo de ventas.

Ése es el caso de una de las marcas más reconocidas en la Feria de Abril de Sevilla, la de la manzanilla La Guita, cuyos responsables ya dejaron claro ayer que tienen buenas previsiones respecto al consumo que se va a producir este año en el festejo sevillano.

Así, según las expectativas de La Guita, marca líder del sector de la manzanilla, y en comparación con pasadas ediciones de la feria, se prevé un ligero aumento del consumo. Para este año se estima un consumo de más de 650.000 botellas, alcanzando una presencia de más del 60% en las casetas del recinto y convirtiéndose, otro año más, en la manzanilla más consumida durante la Feria de Abril.

Es, sin duda, una buena previsión para una feria cargada de anécdotas, ya que la próxima será la segunda en toda la historia que transcurra íntegramente en el mes de mayo, tras la de 1962, y será una de las más tardías.

Para garantizar que el vino se consuma en estado óptimo a lo largo de la feria, La Guita desarrolla un importante dispositivo de distribución que garantiza el abastecimiento y el perfecto estado de la manzanilla a la hora de su consumo. Para ello se cuenta con un grupo humano de más de 150 personas y un almacén de 6.000 metros cuadrados situado a escasos metros del recinto ferial.

Este operativo de distribución y la señalización de la fecha de embotellado en la etiqueta garantizan la máxima calidad del vino, que pasa menos de dos semanas embotellado desde que sale de las botas de Sanlúcar de Barrameda.

Y es que no hay que olvidar que parte indispensable de la feria es la manzanilla, que se ha convertido desde la década de los 90, por su carácter fresco y ligero, en el vino más consumido durante el evento, pasando a acumular un 95% del consumo total de vino. Desde ese cambio, La Guita ha sido líder y referente del vino por excelencia de este festejo. Sin ir más lejos, un interesante fenómeno ya típico durante los días de feria es ver pasear por el recinto a los feriantes con las 'guitas' en sus muñecas, una señal del vino disfrutado.