MEMORIAS DE LA CALLE

'EL PIOJITO'

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Con este nombre de 'El piojito' fue bautizado el mercadillo hoy ya tan popular en una gran mayoría de ciudades y pueblos del país, y fue porque su primera instalación se hizo en la Plaza de la Merced, junto al Mercado de Abastos, allí instalado, hoy Centro del Flamenco, que era conocido antes como 'El piojito'.

En los primeros tiempos allí se instalaban dos días a la semana (lunes y martes). Entonces a este sitio acudían algunos comerciantes de la ciudad para vender sus artículos ya que las rebajas aún no habían alcanzado la popularidad de hoy. Fue tomando esta clase de negocios un gran incremento con la llegada a ello de hombres y mujeres de la raza gitana que se han especializado en este negocio y de los cuales una gran mayoría asisten diariamente con sus artículos a las diferentes poblaciones teniendo de esta forma ocupada prácticamente los siete días de la semana.

Traslados de sitio

Debido al auge que fue tomando y ya una vez que se fue dando una organización a estos mercadillos, hubo que buscarles otros sitios más apropiados y con más espacios. De esta forma, de 'El piojito' fueron a la plaza de Madrid, alrededor del estadio. Más tarde pasaron a los antiguos terrenos de la Telegrafía sin hilo y en otro tiempo a los antiguos terrenos de Campsa, en la avenida de Marconi, para terminar en la barriada de La Paz donde está actualmente todos los lunes del año.

Primeros problemas

No cabe duda que la instalación semanal de este tipo de mercadillos originó en su día una gran protesta del comercio tradicional pues éste no lo veía con buenos ojos, toda vez que indiscutiblemente les quitaba negocio ya que hacía una gran competencia en muchos sectores, sobre todo en confecciones, telas, zapatería, etc. Pero a las clases menos pudientes les beneficiaba de una manera extraordinaria. Todo ello originó una serie de protestas y habladurías sobre la procedencia de los artículos que allí se vendían. Nada más lejos de la realidad, ya que una gran mayoría de estos comerciantes de mercadillos suelen ira fábrica con el dinero por delante en épocas ya pasadas de temporadas y suelen adquirir a precios muy importantes para todos.

Hoy todos disponen de sus furgones y prácticamente están a diario en las carreteras ya que trabajan cada día en un sitio diferente. Hay que tener en cuenta que están sometidos a la climatología y a una serie más de elementos.

Anécdotas

Han existido anécdotas de todo tipo, desde las de muchas personas que no quieren que las vean en estos lugares por aquello del qué dirán y si se encuentran alguna conocida todas suelen decir lo mismo: «Aquí he venido por primera vez porque me han dicho que hay cosas interesantes. Francamente no las veo, así que me marcho». Otras llevan bolsas de grandes almacenes para guardar las compras. Lo que sí es cierto es que allí se encuentran cosas interesantes y otras que no lo son tanto.