Reino Unido, que sigue arrojando malas cifras, cede el testigo al mercado nacional que ya es el principal consumidor de jerez. :: L. V.
Jerez

Las ventas del jerez rompen la tendencia y subieron en 2010 tras una década de caídas

España es ya el primer consumidor de los vinos del Marco, aunque el mercado de exportación también creció pese al descenso en Reino Unido

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Las buenas estadísticas mensuales del pasado año que se iban conociendo ya habían abierto una veta a la esperanza, y ayer por fin el presidente del Consejo Regulador del Consejo Regulador del Vino, Antonio Fernández, confirmó que por primera vez en una década marcada por los malos resultados y las caídas en las ventas las salidas de bodegas para la comercialización de 2010 arrojaban un balance positivo.

De esta forma, y pese a que el contexto económico no podía ser más desfavorable, las bodegas de la Denominación de Origen vendieron el pasado año un 1% más que en 2009, lo que supone que salieron al mercado 50,9 millones de litros de vino, manzanilla y vinagre, aunque la mayor parte de la producción corresponde a los caldos, con 46,4 millones de litros vendidos.

En términos globales, en 2010 la comercialización se incrementó en unos 774.000 litros, de los cuales cerca de 300.000 corresponden a vinagre, cuyas ventas subieron de forma mucho más visible que en el caso de los vinos hasta alcanzar un incremento de un 8%.

Fernández, que analizó los datos del pasado año de la mano del director general del Consejo Regulador, César Saldaña, también puso el acento en otra de las singularidades de los datos referidos al año pasado, de los que se desprende que por primera vez España toma el liderazgo en lo que a consumo de jerez se refiere y ha adelantado a Reino Unido como principal mercado.

En concreto, en España el aumento de las ventas está por encima de la cifra general, con un 1,4% de incremento y un total de 12,7 millones de litros comprados, mientras que en Reino Unido la cifra está ligeramente por debajo con 12,6 millones de litros.

Precisamente el mal comportamiento de las ventas en el país anglosajón, donde se ha registrado una caída del 10% en la exportación, es lo que ha imposibilitado que el balance del año pasado no haya sido mucho mejor. Hasta noviembre los registros no eran tan malos, pero en el último mes del año todo se desplomó tal vez como consecuencia del mal estado de la economía inglesa y de la menor agresividad en precios de las marcas.

Pese a todo, la presencia de nuevos mercados emergentes como los de Asia (21% más) o EE UU (4,3% más) y el buen comportamiento de otros tradicionales como Alemania (con un repunte de las ventas del 13%) y Holanda, han atenuado el desplome anglosajón y han permitido que en términos globales la exportación crezca en un 0,8%.

En el caso del vinagre, la comercialización ha crecido en todos los mercados, en particular las ventas del embotellado que han aumentado un 19%, ocho puntos más que las que son a granel.

Ante estos datos, Fernández constató ayer su satisfacción porque se haya roto la tendencia, aunque advirtió que no hay que aventurarse y ser excesivamente optimistas porque aún queda camino por recorrer para «cuadrar el desajuste que existe entre las ventas y la capacidad de producción del sector del Marco de Jerez».