El respaldo total de Rajoy a Camps vuelve a enfrentar al Gobierno y la oposición

El respaldo total que Mariano Rajoy dio el jueves al presidente de la Generalitat valenciana, Francisco Camps, incluso por encima de las decisiones que adopten los tribunales, desató una tormenta política. El Gobierno consideró que las palabras de Rajoy son un «desprecio» a la Justicia y un ataque a las instituciones, mientras que los dirigentes del PP cerraron filas en torno a su líder, al que respaldaron sin matices.

El jefe de la oposición aseguró que Camps será con toda seguridad el candidato de su partido a la presidencia de la Generalitat en 2011, que no contempla 'plan B' alguno para sustituirle, que no se cree «lo de los tres trajes», y que le respaldará «diga la Justicia lo que quiera» sobre su implicación en el escándalo 'Gürtel', en el que podría terminar imputado por cohecho impropio.

La valoración más contundente del Ejecutivo procedió del vicepresidente tercero, Manuel Chaves, que definió las palabras de Rajoy como «el gesto de mayor desprecio» que había oído hacia la Justicia de España. Chaves coincidió con la vicepresidenta primera, María Teresa Fernández de la Vega, en que una afirmación como ésta aún es más grave cuando procede del líderde la oposición. «Esas declaraciones se califican por sí mismas y dicen mucho de quien las pronuncia», comentó De la Vega tras la reunión del Consejo de Ministros. La portavoz gubernamental sostuvo que «quien pretende ser alternativa de Gobierno debe ser más respetuoso con la Justicia y con los ciudadanos». «Estoy firmemente convencida de que la Justicia y los ciudadanos merecen más respeto», insistió.

Para el diputado y ex ministro socialista Jesús Caldera es una actitud institucional «deplorable», que «sólo respeta a la Justicia cuando sus decisiones perjudican a los demás», y para el coordinador general de IU, Cayo Lara, el «desprecio» de Rajoy al Estado de Derecho supone cruzar «una línea roja muy importante» y denota que el líder del PP se escora «cada vez más» hacia la extrema derecha.

Como una piña

La defensa de Rajoy llegó de la mano del vicesecretario general del PP, Javier Arenas, y del presidente gallego, Alberto Núñez Feijóo. Arenas insinuó que todo el PP es una piña alrededor de Rajoy y que suscribe sus palabras porque «toda la dirección apoya a Camps», que es «la única hipótesis» de los populares para ocupar en 2011 la presidencia de la Generalitat.

Núñez Feijóo también eludió cualquier matiz a las afirmaciones de su líder. Indicó que Rajoy, pese a los comentarios que oía, es «una persona absolutamente respetable y respetuosa con todas las sentencias judiciales». Para evitar más discusiones, el presidente de la Xunta sentenció: «A mí me parece bien todo lo que dice Rajoy».

Lo cierto es que las palabras del presidente del PP también sorprendieron en su partido porque la norma no escrita es que cuando un alto cargo es imputado en una causa judicial es apartado de las filas. Así ocurrió con el tesorero Luis Bárcenas, el diputado Jesís Merino y tres parlamentarios regionales en Madrid. Incluso en el caso del eurodiputado Gerardo Galeote, que ni siquiera estaba imputado en la trama 'Gürtel', fue excluido de las listas en las últimas elecciones al Parlamento de Estrasburgo.