Sociedad

Retrato del Cádiz reaccionario

El profesor de la UNED Julio Herrera publica el libro '¡Serviles...!'

CÁDIZ. Actualizado: Guardar
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La mayoría de los tratados y trabajos de investigación sobre el constitucionalismo gaditano de 1812 se basan en los diputados liberales, sus ideas reformistas y su labor de oposición al regimén absolutista de Fernando VII. Ahora, el último libro de Julio Herrera, profesor tutor del Centro Asociado de la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED) en Cádiz, concede toda la atención al grupo reaccionario de Las Cortes, infravalorado u olvidado por muchos de los historiadores que han abordado este decisivo episodio del pasado español. '¡Serviles...!', que será presentado esta tarde por su autor en el Salón de Actos del centro de la UNED en Cádiz (Plaza de San Antonio, 2), hace un retrato exhaustivo de la aportación de diputados como el canónigo sevillano Rodríguez de la Bárcena, quien fuera secretario de la Comisión de Constitución; Francisco Alvarado, quien movía los hilos del grupo desde su exilio en Portugal; los gallegos Bahamonde y Freire o el periodista Justo Pastor Pérez, que escribía bajo el seudónimo 'El imparcial'. «Todos ellos formaban un gran colectivo en torno a Las Cortes», apunta Julio Herrera. El profesor busca, además, terminar con algunas ideas erróneas que se tienen sobre los reaccionarios del Doce. «Ellos no se oponían a las reformas, al contrario de lo que se cree. Alvarado, por ejemplo, escribió una carta muy dura contra la Corte española, a pesar de que era monárquico», sentencia.

Para completar el perfil de los serviles gaditanos, Herrera asegura que estos opinaban que «los liberales actuaban de forma despótica, estaban poco formados y además, sólo buscaban un interés personal en todas sus acciones».

Castigos

Por otro lado, la obra de Herrera recoge varios altercados ocurridos en las sesiones de Las Cortes y las represalias que sufrían los miembros del grupo opositor. «Se supone que los diputados no podían ser castigados pero hay documentos que prueban que a algunos reaccionarios los enviaban en barco a Portugal» si molestaban o generaban polémica.

Otra característica diferenciadora entre ambas formaciones es su concepción de la soberanía. «En el caso de los reaccionarios, estaba basada en la tradición española y no en las ideas ilustradas de 'El Contrato Social' de Rousseau como en el de los liberales», apostilla Julio Herrera.

A lo largo del volumen, el profesor tutor de la UNED expone la actitud del grupo y varios de sus personajes más ilustres. Así, diseña el perfil del servil, no sólo de la época de Las Cortes de Cádiz, sino también de otros periodos históricos anteriores y posteriores. «Hago hincapié en la tradición reaccionaria gaditana y también recojo la aportación de figuras como Beato Diego de Cádiz», personaje clave del siglo XVIII que preconizó algunas de las ideas que enarbolaban los miembros de este grupo opositor.