Los transeúntes miran extrañados el bloque de edificios medio derruidos sin entender por qué no se adelantan los trabajos en el lugar. . :: C. C.
SAN FERNANDO

La Junta acude a la justicia para el derribo de Montañeses de La Isla

El último expropiado de la zona ya ha comunicado al juez que no abandonará su domicilio hasta que consiga un trato justo

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Desde la fuente de la Comunicación hasta la Venta de Vargas. Las obras del tranvía se han adueñado de toda la calle Real. A excepción de una pequeña isla formada ya por edificios medio derrumbados y en la que un sólo hombre aguanta para evitar que sus propiedades no corran la misma suerte, al menos hasta que llegue a un trato justo. Éste es el pensamiento de Joaquín Moreno. Una convicción que ha obligado a la Junta de Andalucía a acudir a la justicia para lograr el derribo de la zona de Montañeses de La Isla.

A Moreno ya le ha llegado la denuncia, impuesta por Obras Públicas, instándole a que abandone su casa, pero el último inquilino que queda en el lugar ya ha comunicado al magistrado que no cederá en su empeño, ya que no le han tasado un local por el que conseguía al mes casi 1.000 euros de su arrendamiento y por su casa le dan 100.000 euros, insuficiente para comprar una nueva. Razón por la que vive de alquiler. Por ello, pide que le den lo que es suyo, ya que él ha pagado impuestos por ese local que la Junta pretende omitir de sus pagos. Ahora está a la espera de que se fije una fecha para el inicio de un proceso en el que poco tiene que perder, pues él ya ha manifestado que le han quitado todo lo que había logrado con su esfuerzo.

Proceso abierto

Lo más llamativo del caso es que, mientras Joaquín no abandone su vivienda y su local el proceso iniciado por los inquilinos continúa abierto y tan sólo se espera la sentencia del mismo. Esta denuncia, interpuesta en Sevilla, alude a la falta de efectos formales en las publicaciones y notificación a los propietarios del futuro del lugar. Asimismo, reseña la carencia de estudios previos en la actuación e incluso afirma que la Junta no ha justificado la necesidad de la expropiación, pues aunque es cierto que el lugar viene recogido como zona verde en las nuevas planificaciones del Ayuntamiento, nada tiene que ver con la dificultad de paso para el nuevo transporte.

Este asunto se le ha atragantado a la Junta que esperaba derribar las casas tras las navidades, y lo más seguro es que parte de la construcción siga en pie en Semana Santa. Precisamente para tenerlo todo listo y que nada entorpezca la celebración, se han intensificado las labores entre la Iglesia Mayor y Capitanía, ya que la intención es que el recorrido esté totalmente terminado y los pasos no tengan inconvenientes para coger por este tramo de Real tan característico, especialmente para la Magna.