Adriá gana el juicio por la compra de El Bulli

El juzgado de primera instancia número 2 de Barcelona ha desestimado la demanda contra los cocineros de El Bulli Ferran Adrià y Juli Soler que presentaron los hijos de su exsocio Miquel Horta, que reclamaban ser propietarios del 84% de las acciones del restaurante.

Según han informado fuentes judiciales, la sentencia rechaza anular la compra-venta del restaurante El Bulli efectuada en 2005, como reclamaban los hijos de Miquel Horta, alegando que Adrià y Soler habían engañado a su padre al comprarle su participación en el local a un precio muy inferior al real.

Ferran Adrià ha dicho sentirse "muy satisfecho y contento" por esta sentencia, que considera que es "un buen punto de partida" para la fundación en la que reconvertirá su aclamado restaurante elBulli, el próximo mes de febrero. Adrià ha apuntado que, desde un principio, creyó en la justicia y ha añadido que no guarda rencor a nadie, ni cree que se tenga que mirar atrás. Además, ha remarcado que está "muy contento" porque el fallo desestimatorio es "un muy buen punto de partida" para sus nuevos proyectos: "ahora tenemos el camino claro para el nuevo proyecto".

El aclamado chef ha reconocido que lo ha pasado mal durante los últimos meses debido a este proceso judicial y por el impacto que tuvo a raíz de la grave enfermedad degenerativa que se le diagnosticó a su compañero y amigo Juli Soler.

Una vez conocido el fallo, Adrià considera que ahora podrá concentrarse e implicarse a fondo en el nuevo proyecto, su fundación, que se constituirá en febrero para que en marzo o abril puedan comenzar las obras.

El fallo desestima, uno por uno, los argumentos que plantearon los hijos de Miquel Horta en su demanda, que sostenían que a su padre le correspondía el 84% de la propiedad de elBulli, por lo que calcularon que debería recibir hasta un máximo de 67 millones de euros. En la sentencia se establece que no existe ningún fundamento que avale la demanda, por lo que descarta los principales argumentos de los hijos del exsocio de elBulli, que aseguraron en su denuncia que Adrià y Soler engañaron a su padre aprovechándose de su inestabilidad psicológica por el trastorno bipolar que padece.

Recurrirán la sentencia

Según los denunciantes, el empresario Miquel Horta entró en El Bulli en 1993 aportando 47 millones de las antiguas pesetas (282.000 euros) en concepto de préstamo y, de acuerdo con los dos cocineros, se adjudicó el 20 % de las acciones del restaurante, que ya tenía dos estrellas Michelín.

Los hijos de Miquel Horta sostenían que el dinero aportado por su padre se correspondía realmente con el 84 % de las acciones del restaurante, aunque finalmente el fallo, que impone el pago de los costes del proceso a los demandantes, ha acabado desestimado sus argumentos al sostener que no estaban suficientemente acreditados.

El abogado de los denunciantes ha anunciado a Efe que recurrirán esta sentencia ante la Audiencia de Barcelona.