BALONCESTO

La Euroliga más abierta

La máxima competición continental comienza con un amplio grupo de aspirantes y con el Fenerbahce turco como principal animador del mercado de fichajes

MADRID Actualizado: Guardar
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El desenlace de la pasada Euroliga fue absolutamente sorprendente. El Olympiacos arrebató la victoria al todopoderoso CSKA de Moscú, tras una remontada histórica de 19 puntos culminada por una canasta en el último segundo de Printezis. El otrora dominante equipo griego se había presentado en la ‘Final four’ de Estambul como el rival más débil frente a su más enconado adversario histórico, el Panathinaikos, el Barcelona y los rusos, liderados por Kirilenko y los grandes favoritos en todas las apuestas desde el día que se abrió el máximo campeonato continental.

Este jueves comienza un nuevo torneo y el panorama ha cambiado radicalmente. El abanico de candidatos al triunfo final se ha ampliado hasta contar con una decena de nombres con fundadas esperanzas de levantar el título el 12 de mayo de 2013 en el O2 Arena de Londres. La crisis económica ha afectado a algunos de los grandes clubes de Europa y ha permitido que las distancias entre unos y otros se acorten y que se sumen a la lista de aspirantes algunos miembros de una liga emergente como la turca, o clásicos con remodelados sueños de grandeza como el Real Madrid o el Armani Jeans Milan de Sergio Scariolo, que pretende tomar el relevo de un Montepaschi Siena, que ha perdido a su mejores hombres y ha tenido que ajustar su plantilla por las estrecheces que padece.

El Fenerbahce Ulker, el ambicioso proyecto que ha emergido desde tierras otomanas, ha sido el que ha agitado el encorsetado mercado europeo, cargado de euros y con fichajes de fuste que le colocan en una posición ventajosa de cara a lograr el cetro continental. Simone Pianigiani es el encargado desde el banquillo de hacer que funcione la combinación de estrellas como Mike Batiste, David Andersen o Bo McCalebb. Los turcos ya han dado la primera muestra de su potencial al batir a los Boston Celtics hace unos días, con el base estadounidense nacionalizado macedonio como líder indiscutible.

No faltarán a la cita el siempre competitivo Maccabi Tel Aviv, ni el vigente campeón, que conserva el bloque de la pasada campaña con Spanoulis a la cabeza. El CSKA pierde a AK-47 -vuelve a la NBA con los Timberwolves de Ricky Rubio-, al retirado Siskauskas y a Shved, pero ha recuperado para la causa a Ettore Messina. El técnico italiano reverdeció en su momento la gloria del antiguo equipo del ejército ruso y ha cambiado los Lakers por la sólida plantilla roja.

Pero, mientras la Euroliga sonríe por el regreso de Messina, lamenta amargamente la ausencia del nombre más importante de la historia de la competición: Zeljko Obradovic. El serbio se ha tomado un descanso y deja huérfanos al Panathinaikos tras trece años al mando, y al torneo, que pierde temporalmente al entrenador más laureado de su historia - ocho títulos con cuatro equipos distintos-.

Los españoles

Mientras, la ACB contará con sus habituales cuatro representantes. Barcelona y Real Madrid pelearán por el triunfo final, mientras que Unicaja y Caja Laboral persiguen colarse en el ‘top 16’ y convertirse en el ‘outsider’ que acaba sorprendiendo a los favoritos. En Málaga confían en su renovado equipo, mientras que Ivanovic ya ha adelantado que los vitorianos, acostumbrados a vivir en las alturas en los últimos tiempos, van a tenerlo complicado en Europa en esta ocasión.

Para los blancos y los blaugranas todo lo que no sea estar en la ‘Final four’ de Londres olerá a fracaso. Con el fichaje de Rudy Fernández y la eclosión de Mirotic, la novena Euroliga parece más cercana para los madrileños, 18 años después de la última. De momento, los de Laso están encuadrados en el ‘grupo de la muerte’ y deberán mostrar todas sus cartas desde la primera fase de la competición.

Más margen tiene Xavi Pascual, con unos rivales más accesibles que le permitirán tener más tiempo para dar forma a una renovada plantilla que, de momento, no ha empezado la temporada con buen pie.