México despide al ministro Blake mientras investiga su muerte

El presidente de México, Felipe Calderón, ha encabezado en la capital mexicana un funeral de Estado que ha servido para despedir a su 'mano derecha', el ministro de Gobernación José Francisco Blake, y a los otros siete funcionarios y militares cuyo helicóptero sufrió el viernes un desgraciado accidente.

A circunstancias fortuitas aún por determinar apuntan por ahora las investigaciones efectuadas en torno al siniestro por especialistas mexicanos, a quienes se han sumado ya los expertos de la Junta Nacional de Seguridad del Transporte de EE UU (NTSB) y especialistas de Francia, país de origen de la aeronave siniestrada.

En la ceremonia luctuosa oficiada en el Campo Marte de la capital, el mandatario mexicano ha dicho que el Gobierno y su país enfrentan "momentos difíciles" con la pérdida de los funcionarios, pero se ha mostrado convencido de que serán superados. "La mejor manera de honrar la memoria de mexicanos tan valiosos como los que hoy despedimos es seguir trabajando unidos, seguir luchando y con mayor convicción aún por las cosas por las cuales ellos lucharon (...) para transformar a México en la patria que ellos querían", ha agregado en presencia de gobernadores y representantes de los tres poderes del Estado.

Ante los féretros del ministro Blake y sus acompañantes, entre los que había cuatro militares, se han escuchado marchas fúnebres y el himno nacional. Calderón se ha referido a todos ellos pero ha dedicado las palabras más sentidas a Blake, "un gran ser humano" que además fue un servidor público "honesto, trabajador, leal, patriota y comprometido con las mejores causas del país".

El presidente mexicano ha entregado a cada una de las familias ocho banderas dobladas que han adornado los féretros, y las fotografías en gran tamaño de los fallecidos. El acto solemne se ha celebrado en medio de un riguroso silencio, en medio de señales de dolor que han hecho recordar el sepelio de otro titular de Gobernación, Juan Camilo Mouriño, quien perdió la vida en un accidente aéreo ocurrido en 2008, paradójicamente cuando ocupaba el mismo cargo que Blake.

Investigación

Horas antes del sepelio el ministro de Comunicaciones y Transportes de México, Dionisio Pérez Jácome, encabezaba una rueda de prensa donde se ofrecían detalles sobre las investigaciones del caso. El ministro mexicano detalló que descartaba a la vista de las pruebas periciales recabadas que la caída del helicóptero se debiera a "algún tipo de daño causado por explosión o fuego".

En la zona donde se estrelló el aparato, un cerro situado en el municipio de Chalco, Estado de México, sus restos fueron encontrados extendidos en un área de entre 150 y 200 metros de largo por 30 o 40 de ancho. El ministro Pérez Jácome considera que las características de los restos hallados apuntan a que "el helicóptero impactó en el terreno en condiciones de integridad estructural". Por lo anterior descartó que el siniestro se debiera a algo distinto a un accidente.

Tres ministros muertos en accidentes aéreos desde 2005

Con la muerte de Blake son ya tres los ministros mexicanos que han perdido la vida en otros tantos accidentes aéreos en México desde 2005. El 4 de noviembre de 2008 fallecía al estrellarse la avioneta en la que viajaba en Ciudad de México el entonces titular del Interior mexicano Mouriño, quien tenía 37 años.

Antes de que ambos titulares de Gobernación hubieran fallecido, había perdido la vida el ministro mexicano de Seguridad, Ramón Martín Huerta, el 21 de septiembre de 2005 al caer a tierra en el Estado de México, centro del país, el helicóptero en que viajaba. El funcionario de 48 años, integrante del Gabinete del entonces presidente Vicente Fox, había asumido el cargo el 13 de agosto de 2004. Martín Huerta era el encargado de entablar las acciones de combate al crimen organizado, una responsabilidad que desde Gobernación y en labores sobre todo de coordinación con los mandatarios de los distintos estados mexicanos llegaron a desempeñar también Blake y Mouriño siendo ministros.