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Aplazada hasta noviembre la cumbre de la Unión por el Mediterráneo en Barcelona

España, Egipto y Francia quieren esperar a que palestinos e israelíes realicen avances en la negociación de paz

MADRID Actualizado: Guardar
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El Gobierno español ha confirmado el aplazamiento de la cumbre de la Unión por el Mediterráneo (UpM) que debía celebrarse el próximo 7 de junio en Barcelona y ha afirmado que esta decisión la ha tomado en consenso con Francia y Egipto, países que copresiden la organización, según ha informado una portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores y de Cooperación.

Fuentes oficiales egipcias han señalado que la cumbre ha sido postergada hasta noviembre. La agencia estatal de noticias MENA ha señalado que el anuncio lo ha hecho el portavoz presidencial egipcio, Suleiman Awad, en una declaración a los periodistas en Atenas, donde se encuentra de visita oficial el presidente egipcio, Hosni Mubarak.

Awad ha dicho que el aplazamiento se había acordado después de las consultas hechas por Mubarak con el presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, y con el presidente francés, Nicolas Sarkozy, en cuyo país se celebró la anterior cumbre de la UpM.

Se trata de la segunda ocasión que se suspende o aplaza una cumbre prevista en el semestre de la presidencia española, tras la cancelación de la cumbre UE-EEUU programada en mayo en Madrid por el deseo de Barack Obama de reducir sus viajes al extranjero y centrarse en la agenda doméstica. La UpM es una organización que tomó el relevo del Proceso de Barcelona y que reúne a la UE con sus vecinos de la ribera sur del Mediterráneo.

Conflicto palestino-israelí

Según las declaraciones de Awad reproducidas por MENA, la cumbre ha sido aplazada con la esperanza de lograr un "avance notable" en las negociaciones indirectas que mantienen israelíes y palestinos, bajo mediación de Estados Unidos. También se ha adoptado la decisión para garantizar "la mayor participación posible" de parte de los países árabes y conseguir que el documento final sea firmado por todos los asistentes, según Awad.

La asistencia de los estados árabes fue puesta en duda la semana pasada por la prensa israelí al asegurar que países como Siria y Egipto amenazaban con boicotear la cumbre de Barcelona si asistía a ella el ministro israelí de Asuntos Exteriores, Avigdor Lieberman. El ministro es visto con recelo en los países árabes por su posiciones derechistas y por haber mandando "al infierno" a Mubarak en un discurso público en el 2008, cuando era diputado.

Ese posible boicot nunca fue confirmado por los gobiernos de Damasco y El Cairo, mientras que la Liga Árabe, que tiene su sede en la capital egipcia y que estaba invitada a la cumbre de Barcelona, había confirmado que asistiría a la conferencia.