sesión plenaria

300 escaños vacíos en el Congreso

La Cámara Baja abre la sesión con la presencia en el hemiciclo de apenas medio centenar de diputados, la séptima parte del aforo

MADRID Actualizado: Guardar
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El Congreso de los Diputados ha abierto esta tarde su sesión plenaria con la presencia en el hemiciclo de apenas medio centenar de diputados, la séptima parte del aforo, lo que supone que pasadas las cuatro de la tarde había casi 300 escaños vacíos.

El Pleno del Congreso se ha abierto con la presencia en la tribuna de la portavoz del BNG, Olaia Fernandez Davila, que defendía una proposición de ley relativa a la reforma del régimen fiscal de las comunidades de montes vecinales en mano común. En ese primer momento apenas había una decena de diputados del PSOE y otros tantos del PP, cuando ambos grupos ocupan normalmente 320 escaños. En proporción, había más presencia de los grupos minoritarios, que contaban en el hemiciclo con buena parte de su representación.

Rifirrafe en el Senado

Más seguimiento... y bronca ha tenido la sesión de control al Gobierno en el Senado. La primera pregunta en la legislatura de María Dolores de Cospedal ha disparado la tensión, ya que ha provocado un cruce de descalificaciones entre los ministros Carme Chacón y Alfredo Pérez Rubalcaba y los senadores populares Agustín Conde y la propia secretaria general del PP.

La pregunta, sobre unos supuestos planes del Gobierno para favorecer la instalación de una base militar estadounidense en el aeropuerto de Ciudad Real, ha traspasado las fronteras de Castilla-La Mancha y se ha convertido en un debate político entre socialistas y populares salpicado de reproches personales. Chacón, tras dejar claro que una base militar de Estados Unidos en Ciudad Real es inviable, ha lamentado que tras 22 meses "callada", sin formular una sola pregunta en el Senado, De Cospedal haya planteado una cuestión carente de fundamento, pues a su juicio ni siquiera tiene base legal.

De Cospedal, en su réplica, ha preferido centrarse en Castilla-La Mancha, así que tan sólo ha mostrado su sorpresa por la "molestia" que la pregunta ha generado en Chacón. "Pero creo que los senadores tenemos derecho a preguntar, sobre todo si es interesante para las comunidades autónomas que representamos", ha señalado antes de concluir, ya al final de su alocución y con algo de ironía: "Me alegro de que haya sido tajante en su respuesta". La intervención de la número dos del PP ha sido interrumpida en varias ocasiones por los improperios de algunos senadores de la bancada socialista.

La ministra ha proseguido con sus reproches en la contrarréplica: "Su pregunta no molesta, le deja a una estupefacta, pues tras 22 meses sólo ha sido capaz de leer recortes de periódico". En su opinión, De Cospedal ha formulado una pregunta inspirada sólo en una información del diario La Gaceta. Y ha concluido con sarcasmo: "Le doy un consejo. Quedan dos años de legislatura, y al ritmo que va le queda una pregunta por hacer. Si le parece, se la prepara un poco más, pues lo merece esta Cámara y los ciudadanos de Castilla-La Mancha. Esperaba más de usted".

La "marisabidilla" Chacón

El rifirrafe ha tenido su continuación en la siguiente pregunta del pleno, de Agustín Conde al ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba. Conde -insatisfecho por la primera respuesta del ministro y en referencia a las críticas de Chacón a su compañera- ha llamado "marisabidilla" a la titular de Defensa. A continuación, el senador se ha vuelto a referir a la ministra cuando, hablando de la jurisprudencia del Tribunal Constitucional sobre la libertad, le ha dicho a Rubalcaba: "Y si no, que se lo explique la que se sienta a su derecha, que fue dos tardes a dar clase a una Facultad de Derecho".

El ministro de Interior ha optado por la ironía en su réplica y ha señalado que al escuchar el debate con la ministra de Defensa no había tenido la impresión "de que hubiera quedado tan mal la señora De Cospedal". Rubalcaba ha afeado al senador del PP sus frases sobre Chacón y ha asegurado que si él estuviera en el lugar de De Cospedal se sentiría avergonzado, "primero porque tengan que salir a echarme un capote y segundo porque usted ha sido un auténtico grosero". "Es una falta de educación parlamentaria que estoy seguro que la señora De Cospedal reprueba tanto como yo", ha concluido.