Convierte su piso de la Avenida en un «importante» punto de venta de droga

Fue su propia clientela la que le delató. El continuo trasiego de politoxicómanos que llegaban desde todos los puntos de Cádiz a comprar a este piso de la Avenida León de Carranza alertó a los vecinos. No era habitual en esta zona ver el ir y venir de drogodependientes en busca de sus dosis diarias. Hasta que dieron la voz de alarma y la Policía se puso a investigar qué estaba pasando. Dónde iban y para qué.

Así llegaron hasta un bloque de pisos situado en la Avenida, en las inmediaciones del Estadio. Hasta allí se desplazaban los toxicómanos a diario, a cualquier hora del día, para comprar las papelinas que calmaran su 'mono'. Llegaban, subían y a los pocos minutos regresaban con las papelas ya en el bolsillo.

Tras realizar algunos seguimientos y vigilancias a estos consumidores, agentes de las brigadas de Seguridad Ciudadana y de Policía Judicial de la Comisaría Provincial de Cádiz, les pudieron intervenir varias sustancias y empezaron a hilar la historia.

El punto de venta hubiera pasado desapercibido. Era un piso 'normal' de una zona 'normal' que no hubiera despertado ninguna sospecha sino fuera porque sus clientes eran habituales del 'trapicheo' de la capital, viejos conocidos. La vivienda se la había alquilado la propietaria a una pareja en el mes de diciembre. Les cobraba de renta unos 500 euros al mes. Los inquilinos eran una mujer de 42 años con empleo fijo. Y su pareja, de 35, dueño de un pequeño ultramarinos. Nada apuntaba a que al menos el detenido se estuviera sacando un 'sobresueldo'.

Pero a mediados de abril y después de recabar varias denuncias –incluso de algún hostelero de la zona por hurto– se intensificaron las pesquisas. Así, en mayo agentes de radiopatrullas, avisados de lo que podía estar ocurriendo, interceptaron a varios compradores que acababan de adquirir la droga. Otros fueron pillados por los agentes de la Unidad de Drogas y Crimen Organizado (Udyco) quienes seguían recabando información. Poco a poco las piezas iban encajando.

Tras estas intervenciones, los policías tuvieron constancia de que los toxicómanos empezaron a consumir también en el interior del piso, incluso en las escaleras. Así intentaban evitar que se les viera. Sin embargo, finalmente no les sirvió de nada.

La investigación continuó y el presunto vendedor fue detenido en el momento que abandonaba el domicilio para ser trasladado hasta la Comisaría donde se tramitó el correspondiente atestado policial. Una vez concluidas las diligencias se le llevó al juzgado.

La intervención ha sido realizada por agentes de la Udyco de la Brigada de Policía de Judicial, apoyados por miembros de la Brigada de Seguridad Ciudadana de la Comisaria Provincial de Cádiz.