«Si hay playas que tienen unas condiciones favorables para su uso, esas son las de Cádiz»

El alcalde de Chiclana y responsable de Turismo de la Diputación de Cádiz, José María Román , se muestra optimista de cara a la temporada de verano a pesar de las dificultades que tendrá que afrontar la provincia a consecuencia de la crisis provocada por el coronovirus. Considera que Cádiz cuenta con condiciones favorables para ser uno de los destinos escogidos por los españoles en los próximos meses.

«Todos estamos de acuerdo en que en los próximos meses se va a imponer un turismo de cercanía porque gran parte de los desplazamientos se van a producir en vehículos privados. Y precisamente ese tipo de turismo es el que tenemos en la provincia en julio y agosto, por lo que en ese sentido podemos hablar de que hasta nos beneficia», aseguró el político, que a su vez puso de relieve la importancia del turismo alemán a partir de otoño para mantener los buenos datos de ocupación en temporada baja.

Mientras tanto, el vicepresidente de Diputación considera que la provincia de Cádiz es la que cuenta con las condiciones más ventajosas ante el tipo de turismo que se espera en los meses de verano. «Nosotros no vamos a tener los problemas de otras zonas como las playas de Levante donde la gente suele estar amontonada. Aquí en Chiclana, por ejemplo hay playas que no se llenan ni los domingos», apuntaba, a la vez que explicaba que la mayoría del litoral gaditano cuenta con playas de hasta 100 metros de longitud y 50 metros de arena seca.

A juicio del regidor chiclanero, «por sus características, si hay playas que tienen unas condiciones favorables esas son las de la costa de Cádiz y Huelva. Son zonas de baja densidad, que cuentan con espacio suficiente para evitar aglomeraciones y que no están masificadas. No obstante, es consciente de que la coyuntura actual obligará a llevar a cabo una serie de restricciones en su uso, al menos hasta que no se desarrolle una vacuna contra el Covid-19.

«Será cuestión de tomar conciencia y de adaptarse a que cada familia respete las condiciones de distancia con respecto a otras, y evitar situaciones de tensión. Hay que hacerse a la idea de que habrá que utilizar todo el ancho de las playas y no sólo una franja determinada», argumentó Román, que puso sobre la mesa medidas de control como un incremento de personal para que se encargue de que se cumplan las medidas de seguridad.

A pesar de la incertidumbre que existe en torno al uso de las playas y a la apertura de los hoteles y restaurantes, el diputado estima que toda las playas puedan estar operativas el próximo mes de junio. Román confía incluso en superar los datos de ocupación hotelera que barajan los hoteleros gaditanos, que la sitúan en un 50% durante el mes de agosto. «Si esta provincia puede salvar los meses de julio y agosto , la coyuntura económica y de empleo será muy distinta que si no lo podemos salvar», concluyó el político.