Los consejeros de Turismo y Presidencia, Luciano Alonso y Antonio Ávila, respectivamente. :: J. FERRERA / EFE
ANDALUCÍA

La Junta liberaliza la construcción de grandes supermercados

El Gobierno andaluz adapta 16 normas a la directiva europea que suprime trabas burocráticas para la actividad económica

SEVILLA. Actualizado: Guardar
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Una liberalización a medias. De ahora en adelante ya no será necesaria la autorización de la Junta de Andalucía para la instalación de una gran superficie comercial. Será competencia exclusiva de los ayuntamientos. La Junta, no obstante, se reserva el derecho a intervenir por criterios urbanísticos, territoriales o medioambientales en la licencia de establecimientos comerciales de más de 2.500 metros. La liberalización será total en superficies menores de ésta, caso de los grandes supermercados. Hasta ahora, la Junta autorizaba las superficies comerciales de más de mil metros según criterios de oferta y demanda.

Los cambios obedecen al ajuste obligado de las leyes andaluzas a la directiva europea de servicios para simplificar procedimientos que afectan a la actividad económica. En este sentido, el Consejo de Gobierno aprobó ayer un decreto ley por el que se modifican 16 leyes, entre ellas la Ley del Comercio Interior de Andalucía, y otros 92 decretos y 27 órdenes de la Administración andaluza.

El consejero de Presidencia, Antonio Ávila, aclaró que las modificaciones tienen como objetivo simplificar trámites y eliminar barreras en el sector servicios para consolidar un mercado de libre circulación transfronteriza. Las modificaciones suponen básicamente la sustitución de la autorización administrativa previa por declaraciones responsables o comunicaciones o la supresión de requisitos discriminatorios.

Los cambios afectarán de manera radical a la Ley de Comercio Interior en lo que concierne a las grandes superficies. El consejero de Turismo, Comercio y Deporte, Luciano Alonso, aclaró que Andalucía se ha decidido por un modelo intermedio entre el de Cataluña, que mantienen potestad sobre las licencias, y el de Madrid, que promueve la liberalización total. Se trata de un «modelo de equilibrio» que elimina la autorización previa de la Junta fijada por criterios de la oferta y la demanda de una zona para superficies comerciales de más de mil metros. A partir de ahora, la Junta delega en los ayuntamientos para que sea una ventanilla única la que conceda la licencia para todo tipo de comercios. Con ello se reducirán los más de ocho meses que suele tardar el trámite en algunos casos. Ahora bien, la Junta se reserva el derecho a intervenir en la construcción de aquellos de más de 2.500 metros por criterios medio ambientales, territoriales y urbanísticos. Alonso, que aseguró que la medida ha sido consensuada con el sector, anunció la elaboración de un plan de establecimientos atendiendo a dichos criterios en el plazo de un año y buscando el equilibrio territorial. Aclaró que no habrá moratoria por ello.

Otros cambios afectan a leyes como la de Museos, Patrimonio Histórico, Carreteras y Turismo. En ésta se sustituye el requisito de una autorización previa para la actividad turística por una declaración responsable ante la Junta, que después inspeccionará la actividad.