Equipo con alma

Es evidente que estamos mal, no es cuestión de buscar excusas baratas ni de poner cortinas de humo, para eso ya están otros. Lo que sí me gustaría hacer con la que está cayendo (textual y figuradamente) es buscarle un lado positivo a todo esto, si es que lo hay, o por lo menos algo donde agarrarnos para confiar en el proyecto y no vernos abocados de nuevo al pozo. Y para sacar una lectura positiva se me ha ocurrido echar la vista atrás y fijarme en el último precedente cadista en Segunda a estas alturas de campeonato. En 2007 los amarillos terminaban el año con una victoria sobre la bocina en Tarragona con gol de Gastón Casas. Tras el triunfo los números de Cádiz eran los siguientes: 25 puntos, 7 partidos ganados, 4 empatados y 7 perdidos, con 18 jornadas disputadas; contaba con 17 goles a favor e idénticos guarismos en contra.

Ahora estamos un poco peor, pero no tanto. Sobretodo teniendo en cuenta que llevamos una jornada menos que aquella temporada. Los de Javi Gracia cuentan con 6 puntos menos que entonces, los mismos goles a favor y, eso sí, 8 goles encajados más que aquel año. Recuerdo que en aquellas vacaciones navideñas (antes de la marcha de Lucas Lobos) incluso se hablaba de ascenso, y ahora sólo estaríamos a tres puntos de aquel equipo si se vence al Nástic.

Además creo que hay varias cuestiones para poder confiar y creer aunque no dejemos de estar preocupados. Ahora hay entrenador, entonces hubo cuatro pero realmente ninguno. Ahora el equipo sabe por lo que pelea, entonces los que estaban no tenían ni idea de verse pululando por la parte peligrosa de la tabla. Y por encima de otra cosa, este equipo tiene alma, tiene ilusión, tiene hambre, tiene ganas de triunfar; el de aquel año contaba con más nombres que hombres y los Contreras, Paz, Casas, Parri, Gonzalo Vicente, etc., quizás tenían más calidad que la actual plantilla pero adolecían de amor propio. Por todo eso, soy de los que cree en el cuerpo técnico y en su capacidad para sacar rendimiento al actual grupo del Cádiz y a los nuevos que traiga el mercado invernal.