Zapatero niega que el Gobierno haya mentido en el 'caso Haidar' y defiende el trabajo de Moratinos

Un día después de la resolución del 'caso Haidar', el Gobierno se ha esforzado en trasladar a la opinión pública que no ha habido concesiones a Marruecos para que permitiera la vuelta a casa de la activista saharaui. Desde Copenhague, también Rodríguez Zapatero ha intervenido en el debate para negar que el Ejecutivo haya mentido. El presidente ha garantizado que el Gobierno no ha engañado "en ningún momento" y ha tachado de "radicalmente absurdo y ridículo" pensarlo. Además ha aprovechado su comparecencia para defender la actuación de su ministro de Exteriores.

Respondía así a las críticas recibidas desde el PP después de que el jefe de la diplomacia española, Miguel Ángel Moratinos, dijera ayer en el Congreso que el Gobierno marroquí le informó de la expulsión de Haidar antes de que ésta saliera de Marruecos. Para Zapatero, de la comparecencia que tuvo lugar ayer en el Congreso se desprende que Moratinos "ha trabajado con responsabilidad" y que España cuenta con un ministro "que siempre que le preguntan dice la verdad". "Ha actuado en todo momento con gran sentido de la responsabilidad y con gran sentido de la sinceridad", recalcaba.

El Gobierno, ha añadido, ha trabajado desde el primer día para resolver la situación de la activista saharaui y lo ha hecho "recibiendo críticas" y soportándolas "democráticamente", en especial Moratinos. Zapatero ha hecho hincapié en la dificultad del caso, en el que se perseguían dos objetivos al mismo tiempo: preservar la vida de Haidar y conseguir que regresara a El Aaiún, como ella deseaba. "Era difícil, es más, había mucha gentes que creía que no iba a ser posible y sin embargo se ha hecho", señalaba antes de agradecer la tarea realizada por todas las personas que han colaborado en el caso y que han confiado en las gestiones diplomáticas del Gobierno. En este contexto felicitaba de manera especial a Moratinos y a todos aquellos que, en circunstancias difíciles, han sabido trabajar "y muy bien diplomáticamente".

Colaboración decisiva

También la vicepresidenta primera ha dedicado casi íntegramente al 'caso Haidar' su comparecencia al término del Consejo de Ministros. María Teresa Fernández de la Vega ha señalado que todo se ha hecho conforme a la legalidad y ha reprochado la actitud del PP por pedir el Ejecutivo aclare las versiones contradictorias que ha ofrecido sobre la expulsión de la conocida como 'Gandhi saharaui'. Mientras que De la Vega y el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, hablaron de una "expulsión administrativa", el titular de Exteriores reconoció ayer que se trató de una "expulsión política". La 'número dos' del Gobierno atribuye la actitud de los 'populares' a su interés por sacar un rédito electoral de todas las complicaciones a las que tiene que hacer frente la Administración.

De la Vega ha explicado que el Gobierno "siempre" va a buscar el acuerdo con la oposición en los temas de Estado aunque ha añadido que es el PP y su líder, Mariano Rajoy, quienes no están "a la altura de las circunstancias" porque sólo pretenden "desgastar" al Ejecutivo. La vicepresidenta primera ha agradecido la colaboración de Francia, Estados Unidos, la UE y la ONU porque, "de otra manera, hubiera sido muy difícil solucionar esta situación". De todos ellos ha destacado el papel de Francia y ha indicado que el Ejecutivo desplegó "desde el primer minuto" un "abanico" de decisiones diplomáticas con países "amigos y aliados". "A la vista está que hemos conseguido nuestro principal objetivo", ha manifestado.

Fernández de la Vega ha reiterado que la posición de España respecto al Sáhara "es la de siempre": buscar un acuerdo justo para las partes "que lleve consigo la libre autodeterminación del pueblo saharaui en el marco de las resoluciones de las Naciones Unidas". Además ha repetido en varias ocasiones que "no ha habido ninguna irregularidad" en la actuación del Gobierno y que todo se ha hecho "con arreglo a la ley". Sobre el coste económico que puede haber tenido el caso para España, Fernández de la Vega no lo ha precisado, aunque ha dicho que "es verdad" que se puso a disposición de Haidar un avión para su regreso a El Aaiún.

Sin concesiones

Antes de la comparecencia de la vicepresidenta, Moratinos mostraba su "satisfacción" por el regreso de Haidar a El Aaiún y también negaba que se hayan hecho "concesiones". "Creo que todos nos debemos felicitar, ese era su deseo, ha sido su lucha, su compromiso, y el Gobierno ha hecho desde el principio todo lo posible para que fuera lo más rápido", ha dicho Moratinos desde Bruselas, donde presenta las prioridades de la presidencia española de la UE para el próximo semestre.

El jefe de la diplomacia española ha asegurado además que "no se han hecho concesiones" a Rabat sino que se han realizado "amplias negociaciones" con las autoridades marroquies que "al final han entendido que lo normal y lo lógico era permitir el regreso" de la activista saharaui, que estuvo 32 días en huelga de hambre reclamando su vuelta al Sáhara. Moratinos insistía en que se ha trabajado "de manera cordinada y positiva" con dos países "importantes", como Estados Unidos y Francia, y que esto no debe de ser un "elemento de crítica" porque se trata, ha agregado, de tres países que tienen "intereses" y capacidad en Marruecos.

Sarkozy, clave para el desenlace

Como destacaba el Gobierno, la intervención de Nicolás Sarkozy ha resultado clave en la resolución de la crisis provocada por la expulsión del Sáhara Occidental de la activista de los derechos humanos. En un comunicado emitido anoche por el Elíseo, la Presidencia expone que el pasado martes, Sarkozy recibió al ministro de Exteriores marroquí, Taïb Fassi Fihri, quien llevó al mandatario francés un mensaje del Rey de Marruecos.

Como consecuencia del entendimiento entre Marruecos y Francia, tal y como dice el comunicado del Gobierno galo, Mohamed VI remitió un mensaje al presidente francés en el que expresaba que, en las condiciones pactadas, la señora Haidar podría recuperar su pasaporte. El contenido de ese comunicado, y el que también emitió año el Gobierno español, forman parte de las condiciones puestas por Marruecos. De hecho, coinciden en que en el Sáhara Occidental regirá la ley marroquí a la espera de una solución del contencioso.