«Las actrices jóvenes me ven hoy como una esperanza»

Sesenta años no son nada cuando se tiene delante a la gran Meryl Streep . La que es la mejor y más completa actriz del cine actual acierta en todo lo que hace, es una de las estrellas más taquilleras en Hollywood y el espejo en el que se miran numerosas jóvenes intérpretes en todo el mundo. «Pienso mucho en todo lo que me pasa. No soy directora ni productora, no escribo y tampoco controlo los guiones que me llegan. Tengo la suerte a mi lado, pero también tiene mucho que ver que siempre he trabajado de la misma manera: muy duro», dice.

Meryl Streep está de estreno. La atractiva y encantadora dama de Nueva Jersey viajó a París recientemente para presentar Julie y Julia, comedia basada en toda una celebridad de la cocina estadounidense, Julia Child, que alcanzó la fama en la televisión USA con sus recetas francesas y se codeó con los grandes chefs.

Bon appetit!. Con ese saludo recibe a un grupo de periodistas en la ciudad francesa, ante los que presenta con la melena suelta, sin apenas maquillaje y vestida de manera informal, atuendo que adorna con uno de esos grandes collares que tanto le gustan. La actriz se ajusta las gafas y sonríe a Stanley Tucci, con el que coincidió en la taquillera El diablo vestido de Prada y repite en este biopic dirigido por la siempre eficiente Nora Ephron que el próximo viernes llega a nuestras carteleras.

«Stanley yo nos reímos mucho, tenemos el mismo sentido del humor. El cocina muy bien, yo...Depende. Cuando mis hijos eran pequeños tenía una persona que cocinaba para nosotros porque yo estaba trabajando y me resultaba muy duro llegar a casa y empezar con la comida. Lo que mejor me sale es la pasta y el pollo asado», confiesa.

La Streep se mete en los fogones y sale bien parada. Da en diana encarnando a esta extravagante ama de casa con una formar peculiar de hablar que cambió la forma de cocinar de los EE.UU.

«Gracias a sus recetas, los estadounidenses recuperaron el gusto porque no bebíamos zumo natural, todo era en polvitos, como los que tomaban los astronautas, y la comida era congelada y frita. Yo la veía en televisión con mi madre, de quien me he acordado para hacer el papel. Mi madre no era una buena cocinera, pero su apetito por la vida era increíble», declara.

Para la actriz, encarnar a este 'Arguiñano en femenino' ha sido especial «En cierta manera, en este personaje está el espíritu de mi madre. Cuando cumplió 80 años le organice un fiesta e invité a 135 personas. La mayoría de sus amigos eran nonagenarios y vinieron todos porque la querían. Y la gente también reaccionaba así con Julia Child, con la que me cartee en los años 80 porque formé parte de una iniciativa para que la comida orgánica estuviera en los supermercados», recuerda.

Como la mayoría de sus compatriotas, Streep también tiene en casa el libro que escribió Child, 'Mastering The Art of French Cooking', que, gracias a la película, ha vuelto a ser uno de los más vendidos. «No lo he leído, pero preparar el papel hice varias de sus recetas. Si eres buena en la cocina, es muy relajante, pero cuando no es tu especialidad puede ser estresante», confiesa la propietaria de dos Oscar que en el filme aparece enorme. «Julia rozaba el 1,90, yo soy veinte centímetros más baja», apunta.

Tv y videojuegos

Con ganas de regresar a San Sebastián, ciudad en la que recibió el Premio Donostia «que adoro. Me encantaría que me invitaran otra vez. La comida allí es espectacular», la estrella de Mamma mía! se ha soltado mucho la melena en sus últimos filmes. «He hecho muchos papeles, en el teatro estuve tres años haciendo comedias, pero la gente se queda siempre con la primera impresión y en mis inicios interpreté muchos dramas. No miro el género, voy con la ola, me dejo llevar por lo que me apetece en ese momento. Me lo tomo como un menú, a veces estoy más por un entrante, otras apuesto por un segundo plato...Yo leo los guiones, no tengo a nadie que lo haga por mí, y cuando lo que está escrito me atrae y el reparto está bien, pues digo que sí», desvela.

La más grande echa la vista atrás y cuenta que a los veinte años sabía que quería formar parte de este oficio. « A esa edad crees que todo es posible. Lo conseguí a los 27, una edad tardía para ser actriz, pero es que me casé, me quedé embarazada y eso me mantuvo ocupada -risas-. Sabía que lo mío era actuar, es lo que amo», dice.

La Streep , que tiene pendiente el estreno de 'Fantastic Mr. Fox' y 'It's Complicated', sigue muy ocupada. «Cuando me preguntan cómo es que sigue trabajando, contestó que no lo sé. Si creo que a las compañeras más jóvenes les doy esperanza, se dan cuenta que su carrera no tiene que acabar cuando cumplan los 30», advierte esta veterana profesional a quien no cuesta nada desprenderse de los personajes que le confían.

No echa de menos Hollywood «porque ahora está dominado por la televisión y los videojuegos. Además, muchas actrices jóvenes son objetivo de las cámaras, siempre tienen que estar en guardia, y eso hace que vivan un mundo irreal, sin tiempo para separar la vida privada de la pública», y lo único que le saca de sus casillas es que alguien le diga que hace filmes para mujeres. «No creo que los jóvenes se sientan atraídos por Julie y Julia porque prefieren la acción. A mí tampoco me gustan las películas de miedo. No pasa nada, los gustos son como las personas, diferentes», concluye.