Sierra

Cabaña anima a las empresas a que acudan al Plan de Reindustrialización

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El secretario general del PSOE de Cádiz, Francisco González Cabaña, ha animado a las empresas y administraciones públicas de la Sierra a presentar proyectos para acogerse a las ayudas que ofrece el Ministerio de Industria para actuaciones de reindustrialización. La resolución que rige esta ayudas fue publicada ayer por el BOE y el plazo de presentación de solicitudes concluirá el próximo día 3 de diciembre.

El dirigente socialista ha recordado que este es el tercer año en el que la comarca se puede acoger a las ayudas generales de reindustrialización, a la vez que ha destacado que el año pasado Industria concedió ayudas a todos los proyectos presentados en la Sierra que reunían los requisitos establecidos. En concreto, se llevó a cabo una inversión de 28.797.033 euros y los 26 proyectos aprobados crearon alrededor de un centenar de empleos. De estas actuaciones, 17 correspondieron a proyectos de industria, con una cuantía de 16.438.874 euros, mientras que se subvencionó 9 proyectos de infraestructuras por un importe de 12.358.159 euros. Cabaña ha valorado de manera muy positiva la sensibilidad del Ministerio de Industria al aprobar una nueva edición de estos planes de reindustrialización, que tienen como objetivo el desarrollo de proyectos de infraestructura e industrias para la creación de empleo en los territorios incluidos en su ámbito de actuación. Además, señaló que «en estos momentos de dificultades reales para las empresas, a la hora de obtener créditos por parte de las entidades bancarias, las ayudas del Plan de Reindustrialización que el Gobierno central ofrece se han demostrado que son el mejor apoyo que pueden recibir las Pymes, con préstamos reintegrables con un interés cero, a devolver en 15 años y con cinco años de carencia».

Agilidad

Cabaña también ha destacado la sensibilidad del Ministerio al agilizar los trámites para que las ayudas puedan ser recibidas durante los primeros meses de 2010, así como la decisión de eximir a las empresas de la exigencia del aval bancario, con el objeto de eliminar las trabas que en otras ediciones hayan podido existir.