Zonas rurales sin efectivos policiales

Manuel Bertolet, alcalde de Torrecera, lamentaba la ausencia de la delegada municipal de Seguridad de Jerez, María del Carmen Martínez, en la Mesa de Seguridad convocada el pasado miércoles en esta pedanía y a la que sí asistieron alcaldes o delegados de los ayuntamientos de La Barca, El Torno, San Isidro y La Guareña. Una ausencia que ha motivado las críticas de los allí presentes y del PSA jerezano, que considera «un ejercicio de cinismo el abandonar de esta forma a los vecinos de las zonas rurales».

La Asociación Unificada de la Guardia Civil advertía en nota de prensa fechada el pasado cuatro de marzo de la «pasividad ante la inseguridad en el campo» sostenida por las administraciones que deberían ponerle coto a una situación que creen se ha agravado al retirarse a la Benemérita las competencias de vigilancia de zonas rurales y su más que evidente repliegue de efectivos y cierre de cuarteles en los últimos años.

Así se manifestaban entonces ante el anuncio de asociaciones vecinales de El Puerto de Santa María de iniciar patrullas de vigilancia, situación que se ha reproducido ahora en la pedanía jerezana de Torrecera y que amenaza con extenderse a otras poblaciones como La Barca.

Las similitudes entre las denuncias de los vecinos de los dos municipios son evidentes y responden al mismo perfil de expolio nocturno permanente y disparidad de objetivo susceptibles de robo.

Ausencia de patrullas policiales nocturnas que disuadan a los ladrones de considerar sus casas y parcelas agrarias como un gran bazar, carencia de respuesta urgente ante situaciones de riesgo inminente para la integridad de personas y bienes materiales, imposibilidad de conectar alarmas ante la falta de tendido eléctrico en muchas explotaciones, impotencia ante la ausencia de detenciones y, en el fondo, el temor de que cualquier noche una de estas rondas de vigilancia ciudadana termine por provocar algún enfrentamiento no deseado, unen, en el plano negativo, a todas estas zonas rurales y poblaciones».