Tolerancia cero con los accidentes laborales

Desde que se celebrara por primera vez el 28 de abril de 1996, el Día Mundial de la Seguridad Laboral en el trabajo no ha dejado de festejarse año tras año en el mundo entero. Alrededor de dicha fecha las diversas organizaciones convocantes a nivel nacional e internacional realizan declaraciones, promueven diversos tipos de actos y proponen y desarrollan actividades, que lleven a la reflexión de todos los ciudadanos y de las instituciones y organizaciones relacionadas con este problema.

Cádiz no podía ser menos y, a pesar de ser hoy la celebración de este Día Mundial, tuvo lugar ayer la presentación del manifiesto que todos los años los sindicatos de trabajadores hacen llegar al subdelegado del Gobierno en Cádiz, Sebastián Saucedo, a través de sus representantes sindicales.

El acto estuvo precedido de una marcha a lo largo de la Avenida desembocando en la Subdelegación del Gobierno situada en la Plaza de España. Tras la presentación a Saucedo de dicho manifiesto, los delegados sindicales se lo leyeron a los trabajadores que se concentraron en las puertas del edificio.

El manifiesto de este año reivindica, además de las medidas contra la siniestralidad, la salud laboral para evitar las enfermedades derivadas de la realización de determinados trabajos.

Según datos ofrecidos por el secretario de Salud Laboral, Manuel García Túnez, en el año 2004 fallecieron en la provincia de Cádiz 13 trabajadores por siniestralidad laboral y por enfermedades relacionadas con el trabajo 429, número que no se ve reflejado en las estadísticas oficiales.

En cuanto a accidentes laborales, España es el único país que desde 1984 ha ido aumentando el índice de siniestralidad, pasando de 5.330 por cada 100.000 trabajadores en ese año, a 6.011 en el año 2006. Sin embargo, en los grandes estados de la Unión Europea se han reducido notablemente, ejemplo de ello es Alemania, que lo ha hecho en un 50%.

Según García Túnez «los accidentes son la punta del iceberg de una serie de condiciones que provocan muertes silenciosas que no se reflejan en las estadísticas, ya que en Cádiz en el año 1996 no consta ninguna muerte relacionada con esta causa».

Si se comparan los datos recogidos en el mes de marzo de este año y en marzo del año pasado en la provincia de Cádiz, en 2008 fueron 1.352 las personas que sufrieron accidentes laborales, mientras que este año la cifra ha aumentado, a pesar del paro, en 1.484, lo que supone un 5,93% más. Este dato convierte a Cádiz, junto a Huelva (que experimentó una subida de un 1%), en las dos únicas provincias andaluzas en las que ha subido la siniestralidad. Según Manuel García Túnez, esto se debe a que «los empresarios están anclados en la desobediencia en la aplicación de la Seguridad en Prevención de Riesgos laborales; las inspecciones de trabajo no pueden actuar, porque están raquíticas en profesionales de la materia, que no tienen ni suficientes medios técnicos, ni humanos para fiscalizar la ley».

Por otro lado, la secretaria de Política Sindical, Empleo y Salud Laboral de UGT, María Luisa Bernal manifiesta que «siempre se debe partir de la base y el esfuerzo en que la prevención no es sólo la ley, sino un deber de todos, y lo importante es la colaboración de todos a los que les concierne, como empresarios, trabajadores, sindicatos, fiscalía o administraciones públicas, entre otros».

Bernal asegura que desde UGT se están llevando a cabo más iniciativas para frenar y concienciar sobre la seguridad laboral. Prueba de ello es la campaña llevada a cabo en los centros escolares con el personaje infantil Evita Percances, dirigida a los escolares más pequeños y que se emite por la televisión andaluza. Para hacer llegar este mensaje a los más mayores se realizan continuas charlas en la universidad, institutos y centros de FP.

Los sindicatos esperan, con su manifiesto de este año, concienciar sobre la seriedad de las enfermedades laborales y que se actúe, ya que más de 16.000 trabajadores mueren en España al año por este tipo de enfermedades. En el año 2004 estas cifras incluyeron 14.016 hombres y 2.109 mujeres, mientras que en las estadísticas oficiales sólo se registraron dos de estas muertes.