Estudian soterrar o elevar carriles en Astilleros para desviar el tráfico pesado hacia el puerto

La Autoridad Portuaria estudia varias alternativas para el paso de camiones en dirección al muelle del Levante, en donde se hará un nuevo relleno para la futura terminal de contenedores.

Según ha podido saber LA VOZ, la empresa Navantia no ve con buenos ojos que los camiones atraviesen los terrenos de la antigua empresa de Astilleros. Por eso, la Autoridad Portuaria barajando otras dos opciones.

La primera sería un paso elevado paralelo a la carretera industrial y la segunda posibilidad, soterrar ese tráfico, también en la misma dirección. Las propuestas ya se han presentado ante el Ayuntamiento de la ciudad y ante Navantia, según reconocen fuentes de la Autoridad Portuaria. «Estamos en conversaciones con el Ayuntamiento y Navantia para elegir la alternativa que más convenga a las tres partes», señalan fuentes del organismo. No obstante, prefieren no dar más detalles hasta que no haya un acuerdo.

Hay que tener en cuenta que la concesión del suelo de Astilleros a Navantia expira el año 2020, por lo que cualquier movimiento que afecte a este terreno necesita su consentimiento. La idea de la Autoridad Portuaria es licitar la primera fase de la ampliación del dique del Levante a finales de este año, con el objetivo de que esté lista en el año 2012.

De momento, ya ha concluido el estudio geotécnico, que consiste en realizar sondeos en tierra y, sobre todo, en el mar para conocer las condiciones del terreno en el que se va a actuar, lo que permite dirimir la tipología de muelle.

También se ha terminado ya la campaña geofísica, que ha arrojado un importante información para el proyectista.

Con los resultados de ambas investigaciones, el encargado del proyecto ya cuenta con datos cruciales para el diseño del muelle. Iberinsa, que es la empresa adjudicataria de la asistencia técnica del proyecto, de hecho ya está trabajando en el documento.

En tres fases

La obra de la nueva estación de contenedores se hará en tres fases y con ella podrá desalojarse el muelle Reina Sofía que se dedicará al tráfico de pasajeros, con una nueva terminal para recibir a los viajeros y zonas aledañas con tiendas y áreas para los autobuses.

La terminal actual dispone de 120.000 metros cuadrados, con 300 metros de fondo y 500 metros de muelle. Con esta ampliación pasarán a ser 380.000 metros cuadrados y 1.700 metros de muelle, según explicó el presidente d ela Autoridad Portuaria, Rafael Barra.

Hoy en día la terminal de contenedores está al 70% de su capacidad, por lo que se prevé que con la primera fase sea suficiente para trasladar ya toda la actividad de la zona de Puerto América.