Congreso vacío

Nuevamente, el día 12 hemos podido contemplar el bochornoso espectáculo del Congreso de los Diputados prácticamente vacío. El presidente de la Cámara baja, señor Bono, ha recriminado tan holgazana actitud con un comentario sumamente sutil. Dejémonos de sutilezas, ya es hora de que a los 'padres de la patria' se les aplique la misma vara de medir que al resto de los españoles. Si la falta al trabajo estuviera justificada, pues nada que objetar. Ahora bien, si no hay justificación se les debería detraer de su generosísimo salario y dietas la parte correspondiente a los días de ausencia injustificada. Pero puede darse el caso de que las faltas siguieran produciéndose, hay algunos que no han asistido en toda una legislatura. Ante este caso lo más justo y expeditivo sería la 'expulsión del trabajo' y otorgar el escaño al que seguía en la lista electoral. En una palabra, igualdad de trato respecto a los millones de trabajadores que día a día cumplen con su obligación y conciencia. ¿Es mucho pedir a estas alturas?