RECORRIDO. Arenas, Pedemonte y Sanz, del PP, andando por las calles de San Fernando. / R. RÍOS
SAN FERNANDO

Una caminata sin saludos

Tan sólo una decena de isleños acudieron a recibir a los parlamentarios, ya que la mayoría de los ciudadanos desconocían la trascendencia del acto

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El pulso de la ciudad no se vio alterado por la llegada de los parlamentarios a San Fernando. Si acaso las medidas de seguridad existentes alertaron a los isleños, pero no los cortes de tráfico, que por las distintas obras que se están llevando a cabo, entre las que destaca la semipeatonalización de la calle Real, se ha convertido en algo corriente para los ciudadanos.

De esta forma, la sesión plenaria institucional del Parlamento andaluz pasó desapercibida para San Fernando, enfrascada en sus quehaceres cotidianos y distraída del acto que acogía el Real Teatro de Las Cortes, lugar en el que la ambientación estaba compuesta por la banda municipal y una decena de curiosos, poco más.

Juan Antonio Benítez es propietario del bar Pizzería el Foro, que se encuentra justo al lado del teatro y que tuvo que «guardar las mesas y sillas que normalmente pongo en la calle dentro del servicio de caballeros, porque, según me dijeron desde el servicio de seguridad, no podía dejarlas ahí. Al menos ha sido una mañana movida porque todos se han tomado un café aquí».

Tras el acto, los parlamentarios recorrieron el tramo que separa el Teatro de Las Cortes de la Capitanía General sin más acompañamiento que las personas cargadas de sus bolsas de la compra que se detenían para observar la comitiva. Pocos sabían de qué se trataba, algunos lo intuían y otros, como era el caso de Manuela Fernández, estaban totalmente perdidos.

Manuela creía que se «trataba de alguna boda, porque yo he visto granos de arroz tirados en el suelo del Museo y tanta gente arreglada..., pero ya luego me he enterado que es que Chaves ha venido a la ciudad».

El acto estaba previsto que se realizara el pasado 24 de septiembre, pero la presencia de los Príncipes de Asturias la retrasó al 10 de noviembre, para finalmente celebrarse ayer. No había ningún signo de festividad en las calles y que se suspendieran los actos programados en un principio no ayudó a que los isleños salieran a la calle a recibir a los parlamentarios, que pasearon por la calle Real sin saludar a ambos lados, sin detenerse a dar la mano o dos besos, simplemente porque no había nadie que reclamara tal atención.

Sin interés

Muchas personas no mostraron el mayor interés ni detuvieron su paso para mirar qué ocurría. Como expone Francisco Jiménez, «cada uno va pensando en sus cosas y, aunque es algo que no esperas, tampoco crees que haya tantas personas importantes; supones que se trata de alguna celebración pero ya está».

En el acto institucional que se celebró ayer en San Fernando faltó la participación de los ciudadanos, principal baluarte para dar sentido a los distintos eventos que tendrán lugar en La Isla para la conmemoración del Bicentenario de Las Cortes. Unos isleños que prefirieron quedarse en el calor del hogar que en el frío de una caminata sin saludos.