España recupera el pulso 30 29

Fue el partido que todo portero sueña realizar. Hombrados hizo 16 paradas de 43 disparos, sacó con la cabeza un lanzamiento de Siodmiak desde los seis metros y detuvo el tiro de Lijewski sobre la bocina que le dio la victoria a España ante Polonia (30-29). Más no se puede pedir.

Después de haber ido por detrás en el marcador durante buena parte del partido, Juanín empató a 29 a cinco minutos del final. La selección española tuvo hasta dos balones para haberse puesto por delante, pero falló. Por fortuna, Tkaczyk cometió un error y fue expulsado, dejando a Polonia en inferioridad. Rocas, otro héroe de la mañana, anotó el definitivo 30-29 y dio a España su primer triunfo en los Juegos.

Lo cierto es que nadie daba un euro por el equipo de Pastor, sobre todo cuando en el minuto 46 Polonia ponía el 22-27 en el marcador. Los cinco goles de desventaja ante la subcampeona mundial parecían un abismo. Y más cuando poco antes los polacos habían hecho un roto a los españoles en menos de cuatro minutos al meterles tres goles a la contra originados por una pérdida de balón, una falta en ataque y una parada del meta Szmal.

Tal mazazo hubiese acabado con la moral de cualquiera, pero España reaccionó sin tocar ninguna pieza del esquema. Comenzando por Hombrados, que se dedicó a parar casi todo lo que le llegaba; siguiendo por Davis, que hizo un papel inconmensurable en el avanzado; y acabando con Rocas, que apareció en los momentos más importantes para marcó cinco de los últimos ocho goles de la selección.

Así se llegó al final del partido. Después de levantar un choque que tenía prácticamente perdido, España se puso por delante (30-29) y supo mantener el marcador. Y eso que Malmargo casi resucita a la tropa de Wenta a falta de diez segundos. El lateral se empachó de gol y falló lo infalible desde la línea de los seis metros.

La selección polaca se fue arriba, pero los españoles hicieron una falta rápida. Quedaban tres segundos. Se la jugó Lijewski desde su casa y se encontró con Hombrados. No hubo tiempo para más.