Ibarretxe sacará adelante su proyecto de consulta gracias al apoyo del PCTV

El 'lehendakari' Juan José Ibarretxe tiene asegurado un apoyo suficiente a su proyecto de consulta popular gracias al Partido Comunista de las Tierras Vascas (PCTV). El texto se votará hoy en el Parlamento vasco y uno de los diputados 'abertzales' lo respaldará para romper así el previsible empate a 33 entre los partidarios y los detractores del plan soberanista. La victoria, además de por la mínima, será pírrica, porque el Gobierno recurrirá la iniciativa ante el Tribunal Constitucional, lo que de manera automática paralizará la iniciativa.

El PCTV repetirá la jugada que protagonizó Batasuna el 30 de diciembre de 2004 con el primer 'plan Ibarretxe' y pondrá al servicio del 'lehendakari' los votos justos para que su proyecto salga adelante, pero dejará claro que ese respaldo es instrumental porque no comparte la iniciativa.

La formación de la izquierda 'abertzale' pretende dejar sentado que si no hay consulta no será por su rechazo. «Será España la que impida la consulta y el PNV quien lo acepte», señalaron fuentes del partido al rotativo 'Gara'.

La portavoz del PCTV, Nekane Erauskin, precisó ayer que su gesto no es un respaldo, sino que busca «poner de manifiesto el verdadero rostro del PNV», ya que «el derecho de autodeterminación de Euskal Herria no cabe en esta legalidad y en esta Constitución».

La parlamentaria descalificó la iniciativa de Ibarretxe porque es «un nuevo fraude estatutario» con el que el PNV intenta ganar «credibilidad» y recuperar el «espacio electoral perdido».

Los nacionalistas, o al menos un sector del partido, respiraron aliviados con la decisión del PCTV pese a las duras descalificaciones recibidas. Algunos, como el portavoz parlamentario Joseba Egibar, daban por descontado el apoyo desde hace algunos días. El presidente del PNV vizcaíno, Andoni Ortuzar, afirmó que el sí parcial del partido vicario de Batasuna es una exigencia a ETA para que declare «un alto el fuego permanente».

Otros dirigentes del PNV temían que los parlamentarios del PCTV se abstuviesen en bloque para forzar un empate a 33: PNV, Eusko Alkartasuna, Ezker Batua-IU y Aralar en el bando favorable, y PSE y PP en el contrario.

En ese caso, se tendría que repetir la votación el lunes y el PCTV acapararía el protagonismo político en torno a la consulta, lo que relegaría a Ibarretxe a un papel de comparsa. Pero querer ver un desmarque de ETA en el gesto tacticista del PCTV, indicaron fuentes nacionalistas, es «una ingenuidad».

Difícil panorama

Sea como fuere, Ibarretxe y el PNV se van a encontrar al día siguiente con un panorama de difícil gestión. El Gobierno ya ha anunciado que recurrirá ante el Constitucional la ley aprobada por el Parlamento vasco. La corte, una vez recibido el escrito gubernamental, suspenderá la norma durante cinco meses, lo que impedirá la convocatoria de la consulta el 25 de octubre, la siguiente fecha en la hoja de ruta del 'lehendakari'.

La dirección del PNV ha garantizado que «no se abrirán las urnas» si el tribunal paraliza la ley y «acatará la legalidad como siempre ha hecho», en palabras del líder del partido, Iñigo Urkullu.

Ibarretxe no acaba de mostrar sus cartas y tampoco sería de extrañar que opte por caminar por un sendero distinto al marcado por la dirección de su partido. Ya lo hizo cuando planteó las dos preguntas que se someterían a la consulta popular. Urkullu había asegurado que incluirían algún tipo de condena a ETA, pero esa reprobación no apareció por ningún lado cuando el 'lehendakari' las hizo públicas.

Conciencia tranquila

El jefe del Ejecutivo vasco manifestó ayer que tiene «la conciencia muy tranquila» por el respaldo parcial del PCTV, que a su juicio no supone ninguna sorpresa pues tenía «la seguridad, desde el primer momento, de que el proyecto salía» con el respaldo de la izquierda 'abertzale'.

El 'lehendakari' no soslayó la posibilidad de que el Constitucional suspenda la ley aprobada por el Parlamento y se refugió en su habitual lenguaje críptico.

Por un lado, recordó que el PNV «ha cumplido siempre las leyes», pero por otro alertó de que «los retrasos y las prohibiciones serán intentos vanos» porque Euskadi está en un nuevo tiempo en el que «de poco servirá» una suspensión por parte del Constitucional.

En ese más que probable supuesto, el Gobierno vasco, anticipó Ibarretxe, responderá «con la firmeza debida» porque el viaje emprendido no tiene retorno y «la puerta del derecho a decidir está abierta para siempre».