La fuga de gas de un camión cisterna obliga a desalojar a 2.000 personas

Una fuga de gas propano de un camión cisterna de la empresa Repsol, que transportaba 20.000 litros de esta mercancía, ha obligado ayer por la mañana a desalojar a unas 2.000 personas del ayuntamiento, la biblioteca municipal y varios hoteles y edificios del casco antiguo de Benidorm .

Según fuentes policiales y de los Bomberos, el incidente se produjo sobre las 10.50 horas, cuando el camión había pasado bajo un puente con una altura limitada de 3,25 metros situado en el camino El Puente, que da acceso a la plaza Triangular y a la avenida del Mediterráneo.

El accidente se ha producido en la zona donde se encuentran la mayoría de oficinas de bancos y cajas de ahorro, a escasos metros de la plaza de Sus Majestades Los Reyes, donde se encuentran la biblioteca municipal y el edificio consistorial, en el que trabaja una plantilla de 1.100 trabajadores.

Según fuentes policiales, el camión cisterna ha rozado la parte interior del puente, lo que ha hecho que saltara la espita de una válvula y que un chorro de gas propano saliera sin parar de la parte superior de la cuba durante casi una hora y media.

Fuentes municipales han precisado que el conductor ha dado negativo en la prueba de alcoholemia y, según su declaración, que ha sido remitida al juzgado, ha escogido ese camino guiado por un dispositivo GPS.

Lo ocurrido ha obligado a evacuar durante dos horas tres hoteles, varios bloques de viviendas de entre seis y diez plantas, una decena de comercios y restaurantes, el ayuntamiento y la biblioteca municipal.

No obstante, ninguna persona ha resultado intoxicada por inhalación de gas, según han confirmado fuentes del Centro de Información y Coordinación de Urgencias (CICU).

En la zona se ha establecido un perímetro de seguridad de unos 500 metros y se ha cortado durante casi dos horas los accesos al centro de la ciudad.

Bomberos del parque de Benidorm y técnicos de Repsol se han desplazado al lugar para contener la fuga, que se ha dado por controlada alrededor de las 12.30 horas.

Los técnicos han trasladado el camión cisterna a las afueras de la ciudad, donde se ha trasvasado la carga sobrante a otro vehículo.

La primera teniente de alcalde de Benidorm , Ángela Barceló, ha informado poco después de que todos los afectados podrían volver a sus domicilios en el transcurso de dos horas y les ha recomendado que airearan las viviendas y que no utilizaran aparatos eléctricos ni encendieran fuegos.

Barceló ha explicado que unas 150 personas han participado en el plan de emergencias y ha apostillado que ha sido una «suerte» que el gas fuera propano y no butano.

En ese sentido, fuentes de la Policía Local han explicado que no se trata de un gas tóxico, aunque sí puede producir mareos y afectar a personas con dificultades respiratorias.

Aunque a mediodía la zona ya había recuperado la normalidad, la desorientación ha sido la nota predominante durante los primeros minutos.

Muchos de los empleados de los comercios, establecimientos hosteleros y oficinas de la zona han salido corriendo y algunos han llegado incluso a pensar que había explotado una bomba o que había reventado una gran manguera.

A pesar de ello, el desalojo de los hoteles se ha hecho con «calma y tranquilidad», según han comentado los empleados, y ha sido rápido gracias a que muchos clientes estaban en la playa en ese momento.

A raíz del incidente, la patronal hotelera Hosbec ha exigido el «desbloqueo inmediato» de las obras de canalización de gas con el fin de «planificar a medio plazo la sustitución de todos los depósitos».