ADIÓS. La noticia del cierre de IslahAbitada ha conmocionado a compañeros y creadores.
Cultura

Malos tiempos para la plástica

Galeristas y artistas locales lamentan el cierre de IslahAbitada y lo achacan a la crisis del mercado y la falta de respaldo oficial

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La mala salud del mercado del arte local es evidente. La caída de las ventas, la menor asistencia de público a las galerías, la débil promoción y la falta de apoyo institucional han conducido al cierre de la galería IslahAbitada, una noticia que ha sido acogida con gran estupor por compañeros de profesión y artistas plásticos que formaron parte de la evolución de este espacio expositivo. La desaparición de IslahAbitada -anoche cerró definitivamente sus puertas al público- se suma a la de Milagros Delicado hace justo un año y al éxodo de otras galeristas de renombre como Magda Belloti o Carmen de la Calle. Claros síntomas de que la crisis del sector es persistente.

LA EXPERIENCIA

Rafael Benot. Galería Benot

Con 17 años de vida, la galería regentada por Rafael y Lorena Benot -padre e hija- es una férrea superviviente a este tipo de adversidades. «Nosotros ya hemos vivido más crisis y nuestro consejo es intentar sobrevivir, aguantar y optar en muchos casos por la obra gráfica», afirma Rafael Benot, una disciplina artística que implica el abaratamiento de los costes y mayores «posibilidades de compra». Es cierto que «comprar arte es un lujo y estamos notando desde hace meses que viene menos gente y las ventas se reducen», reconoce el galerista. Es el momento de «pedir apoyo a las administraciones públicas», ya que «igual que se hace con el flamenco, se puede hacer con todo tipo de manifestaciones culturales».

Por otro lado, Rafael considera una buena forma de ayudar a las galerías de Cádiz que los encargos de las instituciones se hagan «a través de nosotros y no directamente a los artistas, porque podemos asesorarles». Los responsables de Benot siempre se han esforzado en promocionar la galería en muestras y certámenes regionales y nacionales. Por lo pronto, está prevista su presencia en la feria Cádiz 08 Arte Contemporáneo, que organiza en junio el Ayuntamiento de Cádiz. Además, «estaremos en julio en un stand en el Baluarte».

EL RESURGIR DE 'LA PEPA'

Manuel Garayoa. Galería Viva la Pepa

Tras el fortín del arte pop en Cádiz, la galería Viva la Pepa, se esconden los rostros de Manuel Garayoa y Gemma Naves, que hace unos años decidieron buscar su propio hueco en el mercado local y apostar por el sector más popular del arte. No obstante, al observar que el de Cádiz era «un mercado corto», optaron por ce-rrar durante el invierno y abrir la galería únicamente en verano.

Así, tras varios meses de inactividad, Viva la Pepa regresa en junio para participar en la feria de arte de Santa Catalina, al término de la cual volverá a abrir sus puertas en la calle Valverde. «Nosotros decidimos evolucionar al ver el panorama», reconoce Manu Garayoa, quien asegura que Cádiz tiene problemas para «en-gancharse a la modernidad». La actual crisis es propia de «un mercado incipiente», aduce. «La ciudad se está reconstruyendo, sólo hay que ver la cantidad de obras de rehabilitación que se están llevando a cabo. Luego vendrá la fase de decoración», apunta el galerista. Si bien, es cierto que en todo el país, «está siendo un año complicado para el arte. Hay una caída considerable en la evolución del consumo y eso repercute en este mercado». Sobre la aventura de IslahAbitada, Garayoa confiesa ha sido un «empeño heroico y magnífico».

ARTÍCULOS DE LUJO

Emilio Jiménez. Galería Ártica

Por otro lado, la Galería Ártica, ubicada también en el casco histórico de la capital, es una de las pocas que subsiste ante las inclemencias de la anunciada recesión económica. A Emilio Jiménez, uno de los tres socios del espacio de la calle San José, 33, no le ha pillado por sorpresa la noticia. «Se está notando mucho la crisis. Lo que comercializamos no es algo imprescindible, la gente no compra cuadros por necesidad». No obstante, aparte de la escasez de ventas, Emilio reconoce que «respaldo oficial, no hay», por lo que cada vez es más difícil para estos establecimientos seguir adelante. «Nosotros llevamos cuatro años y estamos intentando aguantar», afirma apesadumbrado este galerista.

APOYO INCONDICIONAL

Andi Rivas y Raúl González.

EmotiveProject

Desde su creación, la galería IslahAbitada ha apostado firmemente por apoyar a nuevos valores locales de las artes plásticas, figuras jóvenes de la provincia que han paseado sus creaciones por las paredes de la sala durante estos cuatro últimos años. Así, Lolo Pavón, Lita Mora, Alejandro Botubol o los miembros del colectivo EmotiveProject han configurado la lista de autores promocionados por la galería. En el caso de Andi Rivas y Raúl Gómez, miembros del estudio multidisciplinar afincado en la capital que es EmotiveProject, a ambos les unía una gran amistad con los dueños de IslahAbitada. «Ha sido toda una sorpresa», cuenta Raúl. La galería de Candi Garbarino y Antonio Sánchez Alarcón, «nos dio la oportunidad de exponer en Cádiz y nos ha apoyado en varias ocasiones», apunta este joven artista. «En la ciudad, el mundo del arte está sufriendo un trasvase», puesto que no se trata del primer caso de cese de negocio.

Además, los emergentes EmotiveProject aseguran que las salas reciben muy poco apoyo institucional. En lo referente a soluciones, proponen «invertir en obras, apoyar la creación de jornadas, programas educativos...», todo ello para ofrecer algunas «pautas a los ciudadanos» y desterrar definitivamente la idea de que la compra de arte está «cerrada a unas élites». Asimismo, hay que «abrirse a otros mercados, como internet». «Las galerías de Cádiz no pueden centrarse sólo en la clientela de aquí», sino que han de penetrar en otros mercados. En este sentido, la Galería Benot sería un ejemplo, dada su alta participación en ferias y muestras.

MÁS INVERSIÓN PARA EL ARTE

Alejandro Botubol

Botubol es otro de los jóvenes creadores gaditanos que han expuesto sus obras en IslahAbitada. Igual que a los anteriores, a este autor también le une una sincera amistad con los dueños de la galería. «Participé en su apertura», recuerda afectado. Además, reconoce el valor de los responsables de este espacio, que desde el principio «confiaron en una pintura alternativa, en los artistas más jóvenes. Estaba Benot, que seguía una línea, y ellos fueron un contrapunto». Por otra parte, Alejandro Botubol ha participado con IslahAbitada en varias ferias. En cuanto a las causas del cierre, no duda en argumentar que la culpa es de la crisis, pero también del insuficiente apoyo de las administraciones. «El Ayuntamiento lleva dos años organizando una feria de arte contemporáneo pero siempre se queda en algo local, sin gancho turístico alguno», critica Botubol. «Se deberían subvencionar stands en ferias internacionales» para que estas galerías puedan promocionarse fuera y «en-ganchar a un público potencial».

alenador@lavozdigital.es